
Imagen de Mercurio realizada por la sonda Messenger de la NASA. Los orígenes de Mercurio podrían ser distintos a los de sus hermanos planetas, incluida la Tierra, según recientes descubrimientos que muestran depósitos sorprendentemente ricos de azufre en el suelo, declararon científicos el jueves.
La sonda Medición de Superficie, Espacio, Ambiente y Geoquímica de Mercurio, apodada Messenger por la sigla en inglés, lleva tres meses de una misión de un año. También ha hallado pruebas de un campo magnético asimétrico y estallidos regulares de electrones que salen a través de la magnetosfera.
"Es casi un planeta nuevo porque nunca hemos tenido esta clase de observatorio antes", dijo Sean Solomon, que lidera la investigación, de la Institución Carnegie de Washington.
Los volcanes parecen haber tenido un papel importante en la formación de Mercurio, ya que proporcionaban material nuevo para llenar su superficie llena de cráteres, pero probablemente también le dieron una inesperada cantidad de azufre, un descubrimiento que sugiere que Mercurio podría tener diferentes componentes básicos que Venus, la Tierra y Marte.
Los científicos esperaban que Mercurio, que se creía formado en la parte más caliente y densa de la nebulosa solar original, no tendría las temperaturas adecuadas para resistir materiales ligeros como el azufre.