Ciencia y Tecnología
"Desde el punto de vista psicológico, la conexión entre el hombre y el teléfono celular es colosal. Hoy en día cualquiera tiene un móvil, está al acceso de niños y personas mayores. Y resulta que por una parte somos más disponibles, pero por otra, sacrificamos por ello nuestra privacidad", afirmó el psicólogo Konstantín Oljovski.
Según el especialista, con la llegada de la era de telefonía móvil las personas se hicieron más inquietas.
"Por una parte sabemos que podemos comunicarnos a cualquier hora por teléfono, pero por otra, nos abarca una sensación de pánico, cuando olvidamos el celular en casa o se nos pasa recargar su batería", explica Oljovski.
"La mayoría de los científicos no quieren trabajar en los paisajes planos", señaló el geólogo Tracy Gregg de la Universidad de Buffalo. Así que después de que los primeros especialistas en Marte decidieron que Hesperia Planum parecía una llanura llena de lava, nadie volvió a examinarla y el lugar fue utilizado para ejemplificar algo muy importante: la base de un período importante de transición en la escala de tiempo geológica de Marte. El período es llamado acertadamente Hesperiano y se cree que tuvo lugar desde hace 3,7 a 3,1 millones de años.
Pero cuando Gregg y su estudiante Carolyn Roberts comenzaron a buscar en esta llanura de lava marciana datos recientes encontraron cosas nuevas.
"Hay un volcán en Hesperia Planum al que no mucha gente presta atención porque es muy pequeño", dijo Gregg. "Buscando en el resto de la región, no pude encontrar otros respiraderos volcánicos, ni flujos de lava. Es un poco frustrante porque no hay nada parecido a eso en Hesperia Planum". "Una causa probable de este problema es la gruesa capa de polvo", dijo. "Cubre la zona como una nevada".
Un nuevo estudio recién publicado en arxiv.org y que verá la luz próximamente en The Astrophysical Journal acaba de añadir, si cabe, otra dosis de misterio al misterio de la materia oscura. "Después de haber terminado nuestro trabajo -ha afirmado Matt Walker, investigador del Centro Harvard Smithsonian para la Astrofísica y autor principal de la investigación- sabemos aún menos sobre la materia oscura de lo que sabíamos antes de empezar".
Igual que sucede en todas las galaxias, nuestra Vía Láctea alberga una extraña sustancia que los científicos, a falta de una descripción mejor, llaman "materia oscura". La materia oscura es invisible, incluso para nuestros instrumentos más sofisticados, pero revela su presencia gracias a la atracción gravitatoria que ejerce sobre la materia "ordinaria", la que sí podemos ver y de la que todos, personas, planetas y estrellas, estamos hechos. Se ha calculado que la materia ordinaria apenas si da cuenta del 4% de la masa total del Universo, mientras que la materia oscura supone cerca de un 23%.
El estudio sugiere que la anciana tenía inusuales cambios genéticos en su ADN, que parecen haberla protegido contra la demencia y otras enfermedades propias de la vejez.
La mujer fue sometida a una prueba de sus habilidades mentales cuando tenía 113 años y respondió como una persona varias décadas más joven.
Los científicos, reunidos en una conferencia en Montreal, donde presentaron sus resultados, dicen que más estudios podrían revelar más datos sobre por qué hay gente que nace con genes para una vida más larga y saludable.
Entre septiembre de 2008 y agosto 2011, el vehículo de exploración Rover de la NASA, perteneciente a la misión "Opportunity", se desplazó desde el cráter Victoria al cráter Endeavour de Marte. El equipo de video incluido a bordo tomó una imagen del planeta por cada día marciano, equivalentes a un total de 309 imágenes, informó la NASA.
La caminata de la misión duró 3 años terrestres, en los que el Rover se desplazó un total de 21 km.
Al observar estas imágenes, se aprecia que durante el viaje el Rover debió hacer varios desvíos generados por el programa de la misión, para poder esquivar las partes de terrenos peligrosos.
El Rover incluyó una banda sonora utilizando datos diarios de los acelerómetros. Se registraron datos de baja frecuencia que se aceleraron hasta 1.000 veces para obtener frecuencias audibles.
El trabajo, que incluyó la extracción y purificación del ADN de víctimas de la peste enterradas en Londres, es el primero en que un grupo de científicos logra delinear un genoma reconstruido de un patógeno ancestral.
El resultado -un borrador completo del genoma entero de la Peste Bubónica- debería permitir a los investigadores evaluar los cambios en la evolución y virulencia de la enfermedad, y llevar a una mejor comprensión de las enfermedades infecciosas modernas.
La peste bubónica es causada por la bacteria Yersinia pestis (Y. pestis), que se contagia a través de las pulgas con la ayuda de la denominada rata negra, que hoy conocemos como rata de campo.
El enigma, objeto de diversas hipótesis en la comunidad científica, está más cerca de resolverse gracias a observaciones realizadas en el Gran Telescopio Canarias (GTC), el mayor telescopio óptico del mundo. El trabajo, que cuenta con la participación del IAC, deja patente que instrumentos tan potentes como este telescopio, situado en el Observatorio del Roque de los Muchachos (La Palma), permiten que los científicos continúen cuestionándose sus propias teorías para avanzar en el conocimiento de los lugares más lejanos del Universo.
El trabajo, que aparece publicado en la revista Astrophysical Journal Letters, ha sido dirigido por los investigadores de la Universidad de Florida, Jesús Martínez y Rafael Guzmán. El equipo observó cuatro jóvenes galaxias, a ocho mil millones de años luz de La Tierra, y comprobó en sus espectros que eran, en promedio, seis veces menos densas de lo que se creía. Para ello, se han servido del espectrógrafo Osiris, instalado en el GTC.
El nuevo virus, que han bautizado como Megavirus chilensis (al haber sido localizado en la costa de la estación marina ECIM de Las Cruces, en Chile), es pariente lejano del Mimivirus, cuya identificación como tal, en 2003, revolucionó la historia conocida de estos organismos, por sus características únicas, incluyendo el gran tamaño de su genoma. El Mimivirus fue descubierto en 1992 en el interior de la ameba Acanthamoeba polyphaga, en el curso de una investigación sobre legionelosis.
En aquel momento, se clasificó como una bacteria hasta que, en 2003, investigadores del mismo centro que ha identificado a Megavirus chilensis, demostraron en Science que se trataba de un virus gigante.
El ADN de Megavirus chilensis está compuesto por 1.259 millones de pares de bases. Por poner sólo un ejemplo, el genoma del virus de la gripe tiene 13.000 pares de bases. El hallazgo de este microorganismo demuestra que "todavía no se ha alcanzado el límite en lo que a complejidad de virus gigantes se refiere", apuntan los autores en PNAS.

Científicos argentinos hallaron los restos de una ballena de 49 millones de años en la isla Marambio de la Antártida.
El director del Instituto Antártico Argentino, Mariano Mémolli, precisó a la agencia DyN que el cetáceo "no sólo es el fósil más antiguo del mundo de ballena primitiva, sino también el primero localizado en la Antártida" y subrayó que el hallazgo "permitirá colocar a la ciencia argentina a la vanguardia internacional del estudio de la evolución".
El descubrimiento fue realizado por los paleontólogos argentinos Claudia Tambussi (CONICET-Museo de La Plata) y Marcelo Reguero (CONICET, Instituto Antártico Argentino y Museo de La Plata), y los suecos Thomas Mörs y Jonas Hagström (Swedish Museum of Natural History, Estocolmo).
La búsqueda de inteligencia extraterrestre está basada en nuestros paradigmas culturales. Con la creación del Instituto SETI se popularizó la teoría de que una civilización extraterrestre avanzada debería de haber desarrollado la radio y debería de comunicarse de esta forma en la profundidad del espacio. En los últimos años se ha especulado mucho sobre inteligencias artificiales pululando en el espacio desarrolladas por extraterrestres que hayan evolucionando al ámbito de la postbiología, quizás satélites, planetoides o hasta pulsares inteligentes.
¿Pero por qué no considerar la posibilidad de que una civilzación extraterrestre suficientemente avanzada ya no esté basada en la materia? Esto es justo lo que explora el reconocido astrobiólogo Paul Davis en su nuevo libro The Eeerie Silence. Si nos basamos en un cálculo probabilístico el universo debería de estar repleto de civilizaciones extraterrestres, ¿por qué no las vemos, entonces? Tal vez esto se deba a que estas civilizaciones, que han tenido miles de millones de años para evolucionar, han logrado manipular la energía y la conciencia de formas que nos son difíciles de imaginar.
Comentario: Lectura recomendada:
Pestilencia, la Gran Peste y la Cura del Tabaco