
Los palestinos presos en las cárceles israelíes viven en condiciones infrahumanas, carentes de elementos fundamentales como agua, comida, atención médica, educación, visitas regulares y un abogado.
En un comunicado, Al-Wad denunció que guardias del Gobierno israelí no entregan mantas ni ropa a los cautivos palestinos, quienes en protesta contra su detención ilegal, están manteniendo una huelga de hambre.
Anteriormente, el ministro para los Asuntos de Prisioneros del Estado de Palestina, Isa Qaraque, afirmó que más de mil 400 presos palestinos enfermos siguen en centros penitenciarios del régimen israelí, de los cuales 150 tienen enfermedades crónicas y más de 25 padecen cáncer.
Comentario: Es decir, personas inocentes: niños, mujeres y personas que necesitan urgentemente atención médica. ¿Qué más podríamos esperar de semejantes líderes psicopáticos?