La trama comienza en Brasil, cuando el periodista de investigación Glen Greenwald es contactado a través de la web por un usuario anónimo que afirmaba poseer información explosiva respecto al servicio de inteligencia más grande de los EEUU, la National Security Agency (NSA). Meses después, el mismo usuario contacta también a la cineasta estadounidense Laura Poitras. La audiovisualista, con numerosos documentales críticos a la política exterior norteamericana en su haber, ya había sido varias veces premiada por sus polémicos trabajos documentando las realidades de las guerras en Afganistán e Irak.
El alias escogido por el usuario desconocido para tales contactos, en extremo cautos, fue "Citizenfour".
Todo esto suena como una obra maestra del cine de espionaje o como un maravilloso thriller escrito por la pluma diestra de los novelistas de más renombre del género. Pero ocurrió. Y fue documentado por diversos diarios alrededor del mundo. No obstante, el periódico británico, The Guardian, fue el que tuvo la primicia.
Comentario: Y hay quienes dicen que, justamente, porque parece un maravilloso thriller escrito por una pluma diestra, podría tratarse de una polémica más bien creada con ciertos propósitos que no necesariamente tienen que ver con la Verdad y una preocupación genuina por el bienestar de la gente, como lo dice Naomi Wolf, experta en este tipo de casos:
No me gusta hacer esto, pero me siento obligada a compartir, a medida que la historia se va desarrollando, mi creciente preocupación de que el filtrador de la NSA no es quien dice ser, y que las motivaciones que intervienen en la historia pueden ser más complejas de lo que parecen ser. Esto no es en absoluto un detrimento de la gran valentía de Glenn Greenwald al reportar la historia, o del coraje del Guardian al exhibir este tipo de informes, lo que es un servicio a los Estados Unidos que los medios no están realizando en absoluto. Es sólo para dar algunas precauciones a medida que la historia se desenvuelve, y para plantear algunas preguntas sobre la forma en que ésta se está desarrollando, basada en mi experiencia con los mensajes políticos de alto nivel.Recomendamos leer también:
Mi creciente preocupación acerca de que el informante de la NSA no es quien dice ser...
Edward Snowden, "citizenfour", dista mucho de parecer un radical exaltado. Tiene un hablar pausado y una actitud de calma, aún a sabiendas de ser el blanco del país más poderoso del orbe. En los Estados Unidos, el debate desde junio del 2013 (cuando fueron publicados los reportajes) hasta ahora, es si el informático, actualmente asilado en Rusia, es un traidor o un héroe.
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