En la declaración suscrita en Moscú durante la reunión mantenida por los ministros de Exteriores de Rusia, Irán y Turquía se destaca la necesidad de proteger la integridad territorial de Siria. Según Yilmaz, esto es algo que las autoridades turcas habían declarado anteriormente en repetidas ocasiones. "Sin embargo, lo importante es que Turquía, por primera vez, a través de Rusia e Irán, ha declarado abiertamente que va a trabajar con Asad. Esto es muy importante", subrayó el político turco.
"La derrota de la oposición en Alepo y su retirada han cambiado en gran medida el equilibrio de fuerzas en Siria. El dominante Partido de la Justicia y el Desarrollo turco —AKP, por sus siglas en turco— ha demostrado el fracaso de su política en Siria. Su influencia en la región, en este sentido, se ha resentido considerablemente", observó.Otro "duro golpe" que ha afectado a la influencia y la imagen del AKP fue el atentado contra el embajador ruso en Ankara, opinó Yilmaz.
"Como resultado, en las negociaciones en Moscú, Ankara, de hecho, se negó a proseguir con la política desastrosa de un cambio de poder en Siria, que ha practicado en los últimos cinco o seis años".
Comentario: Este es un claro ejemplo de cómo estas dificultades pueden terminar uniendo aún más a los países involucrados. También, todos los que consideraron la posibilidad de que el asesinato del embajador ruso podría haber sido un acto destinado a separar aún más a Rusia y Turquía (como mera especulación, por supuesto), ahora pueden decir que resultó en otro gran tiro por la culata, haciendo que los dos países cooperen aún más.
Comentario: Así es, esperemos todos que se den las condiciones necesarias para ayudar realmente a Siria (como lo necesita Siria y NO de manera unilateral, es decir, intentando imponer solamente los intereses propios de una nación). Estas condiciones parece hacerse cada vez más posibles con la intervención exitosa de Rusia y el apoyo de naciones vecinas como Irán e Irak. Turquía ha estado dando pasos ambiguos desde el intento de golpe de Estado fallido, pero si ahora realmente da pasos para cooperar con Asad, podemos tener más esperanzas de que las cosas al fin empiecen a mejorar en la región.
Sin embargo, tampoco podemos subestimar el berrinche demente con el que podría responder a tantas derrotas el establishment estadounidense; quizás en la forma de eventos que generen más caos en la región, justo antes de que asuma Donald Trump, quien ya ha expresado su oposición a seguir financiando a los llamados "rebeldes moderados" y parece apuntar a una política exterior menos intervencionista. Debemos estar atentos a lo que se desarrolla en los próximos días, hasta el momento en que Trump ocupe oficialmente el asiento presidencial.