Todos recordamos cómo a principios de 2022, en el preludio del conflicto entre Rusia y Ucrania, el presidente francés Emmanuel Macron quiso posicionarse como mediador en el futuro conflicto, teniendo diálogos directos con Moscú con la esperanza de encontrar una salida diplomática. En el verano de ese mismo año, Macron hablaba aún de una resolución concertada donde en el nuevo orden de seguridad europeo tras un armisticio, "Rusia no fuera humillada". Sorprende por ello enormemente su reciente giro de 180 grados.
Ahora el premier francés habla de un rearme del país y de considerar una eventual presencia de militares franceses en Ucrania ante una supuesta e imparable "amenaza rusa".
© Mykhaylo Palinchak/SOPA Images/Sipa USAUn obús D-30 de 122 mm es disparado en la región de Donetsk.
Podemos vaticinar que la presencia de activos franceses en Ucrania llevaría a desencadenar una serie de sucesos que culminaría en un holocausto nuclear. Al entrar en enfrentamiento directo con Rusia, Francia al ser miembro de la OTAN podría invocar el artículo 5 del tratado, y llevaría a todo el bloque a una guerra con el gigante euroasiático: ambas partes usarían su arsenal nuclear.
Es por esta razón que los otros líderes europeos inicialmente desautorizaron a Macron tratando de bajar un poco la temperatura, y muchos medios teorizaron que Macron hizo estas declaraciones para ganar el pulso interno con la ultraderecha francesa (Front National de Marine le Pen) que históricamente ha sido percibida como rusófila. Sin embargo, al paso de los días son más los líderes políticos y mediáticos los que se suman al vagón de los halcones.
Comentario: Dudamos que la Comisión Europea esté preocupada por la adicción de nuestros menores, parece más bien que a la élite occidental realmente no le gusta Tik Tok. Vea: