Los Dueños del Circo
El hecho de que las cifras oficiales de muertos durante las revueltas en Egipto la semana pasada supere las 800 víctimas, parece, a escala mundial, algo como un recordatorio de que el Estado y las fuerzas políticas que lo construyen y se lo disputan harán todo lo que esté en sus manos para hacer que la ficción del Estado y la libertad individual pervivan, sabiendo de antemano que se trata de un montaje, de una ficción.
El teórico Andrew Dilks ha explicado cómo para los bancos centrales, al menos en Occidente, la ficción de la burocracia y el simulacro de la deuda construyen la impresión (a través de los medios) de que todo está cambiando para que todo permanezca igual. Los bancos centrales compran deuda, aplican penalizaciones absurdas y dejan sin casa a miles de personas en EU, durante 2009. Esto provoca una recesión económica a escala mundial. Pero si algo ha sabido hacer Wall Street históricamente es capitalizar el descontento. Las consecuencias "reales" de jugar con capitales virtuales están comprendidas dentro del presupuesto: Calderón les llamaba daños colaterales, por ejemplo, y aunque los periódicos hayan dejado de hacerlas evidentes, se siguen acumulando.
Red de espionaje a gran escala
Al escándalo de WikiLeaks, con Julian Assange como cabeza visible, y cuya estela fue seguida por Bradley Manning, se une ahora la filtración de documentos de la NSA calificados de alto secreto por el analista de la CIA Edward Snowden. Estos tres defensores de la libertad de información no han tenido la misma suerte que Milton William Cooper a finales de los años ochenta, ya que mientras Assange y Snowden huyen de la justicia estadounidense a día de hoy, el soldado Manning ha sido condenado a ciento cincuenta años de prisión.
Comentario: Cabe matizar en este punto que ponemos en duda el grado de "defensores por la libertad de información" de Assange y Snowden, ya que hay ciertos aspectos en sus casos que muestran ciertas incongruencias. Para más información recomendamos:
Wikileaks y la Guerra por tu Mente
Mi creciente preocupación acerca de que el informante de la NSA no es quien dice ser...
En esta ocasión, el mayor problema de la Casa Blanca es que la filtración de documentos no solo ha afectado a las esferas políticas, gubernamentales y diplomáticas internacionales, sino a la ciudadanía misma, lo que ha sido considerado un grave atentado a la intimidad y la vida privada por los propios ciudadanos estadounidenses y por el resto de democracias occidentales.
De ser ciertos estos ataques químicos, difundidos por el medio saudita Al Arabiya, "podrían constituir la 'línea roja' que el presidente Obama dijo que impulsaría a EE.UU. a una intervención militar activa en Siria, lo que podría desatar una conflagración en Oriente Medio y una confrontación de superpotencias (con Rusia, China e Irán, por un lado, y EE.UU., Reino Unido, Arabia Saudita, Turquía y Catar por otro)", señala Engdahl.
Por lo tanto, en opinión del analista, el suceso merece ser estudiado con cautela por la magnitud de sus consecuencias y por el "tufo a propaganda de guerra saudita" que desprenden varios "hechos sospechosos que hacen dudar de su credibilidad".
"Mientras que las organizaciones internacionales están ocupadas con los acontecimientos en Egipto, el régimen de Al Jalifa está tratando de extinguir las llamas de la revolución popular en el país mediante la intensificación de la represión contra el pueblo de Baréin", ha señalado el parlamentario persa Seyed Naser Musavi Lariyani.
Musavi Lariyani ha denunciado que el régimen de Al Jalifa aumentara las presiones contra los presos políticos y sus familias, como una vía para detener nuevas protestas, y ha asegurado que la brutalidad policial en ese reinado del Golfo Pérsico no podrá acallar la voz de los opositores.

Foto de archivo de Bo Xilai en marzo de 2012, en el Congreso Nacional del Pueblo, poco antes de su caída política.
Sustracción de órganos, tráfico de cadáveres e intento de golpe de Estado son algunas de las presuntas actividades de Bo, pero no serán mencionados en este juicio, cuidadosamente montado por el régimen.
Las declaraciones oficiales del año pasado acusaban a Bo Xilai de seis crímenes, tres más que las acusaciones actuales. La investigación oficial aprobada por el Politburó del Comité Central del Partido Comunista Chino, parte de cuyos resultados fueron publicados en agosto de 2012, afirmaba que Bo "violó la disciplina organizativa y de personal", mantuvo relaciones sexuales inapropiadas con mujeres y que habría estado involucrado en "otros crímenes".
El Ganj Madrassa (Escuela de Ganj) sirve como centro de entrenamiento de terroristas, donde los estudiantes, so pretexto de cursar estudios religiosos, se radicalizan para llevar a cabo actividades terroristas e insurgentes, apostilla el comunicado de la institución norteamericana.
Conforme al texto de la entidad financiera estadounidense, este centro apoya a los grupos terroristas de Al-Qaeda y Taliban, ya que fue utilizado como base por el grupo militante Lashkar-e-Taiba (LeT), al que atribuyen la responsabilidad de los ataques de noviembre de 2008 en Bombay, La India, con un saldo de 166 muertos.
"Seguiré de pie en mi tarima, gritando lo más alto que pueda durante el tiempo que la gente esté dispuesta a escucharme", afirmó Levison.
Durante la entrevista con RT, señaló que cuando cerró el servicio su mayor temor era "que nadie se diera cuenta, que a nadie le importara", mientras que su mayor esperanza era que "el cierre trajera cambios positivos".
"Continuaré luchando a través del sistema judicial para que este caso sirva de precedente y seguiré presionando al Congreso para que se cambien las leyes", aseguró.
"No existe una bandera lo suficientemente grande para cubrir la vergüenza de matar a gente inocente"

En lugar de 'enviar un mensaje' condenándolo a una sentencia, prácticamente, de por vida, el gobierno de EE.UU. debería enfocarse en investigar las violaciones de derechos humanos y de leyes humanitarias en el contexto de una mal concebida 'guerra contra el terror'."
Manning había entregado a WikiLeaks tanto cables diplomáticos, que revelaron la política exterior intervencionista de EE.UU., como documentos que exponían crímenes de guerra, entre los que se incluyen el video, Asesinato Colateral, que muestra cómo la tripulación de un helicóptero de EE.UU. dispara contra civiles desarmados en Bagdad en 2007. Entre los asesinados hay niños y dos periodistas de Reuters. Los militares estadounidenses festejan grosera e inhumanamente la carnicería.
La Ley de Espionaje, en la que se basa la condena a Manning, fue sancionada dos meses antes de que EE.UU. entrara formalmente en la I Guerra Mundial. Por el carácter tan amplio de la ley, y su ambigüedad, los gobiernos anteriores se abstuvieron de aplicarla, no así el gobierno de Obama. En todos los gobiernos anteriores solamente hubo tres casos de juicios contra denunciantes de conciencia: Daniel Ellsberg por revelar los Documentos del Pentágono que contenían información secreta sobre el accionar de EE.UU. en Vietnam, gobierno de Nixon; el analista civil Samuel Loring Morison, gobierno de Reagan; y Lawrence Franklin, gobierno de George W. Bush. En cambio, el gobierno de Obama ha enjuiciado a ocho denunciantes de conciencia, incluido Manning, por filtrar información a la prensa. Edward Snowden -quien expuso el sistema de espionaje masivo de la agencia gubernamental NSA- fue el último denunciante al que se le presentaron cargos por infracción a la Ley de Espionaje.
Reacciones a la sentencia
La red de Apoyo a Bradley Manning y otras organizaciones sociales convocaron a una vigilia en Fort Meade y a una protesta en la noche del miércoles 21 de agosto frente a la Casa Blanca, en Washington, DC. También habrá movilizaciones en otras ciudades, como Seattle, San Francisco, Los Ángeles, Las Vegas, Chicago, Denver, Mineápolis, Nueva York y Boston.
Amnistía Internacional hizo un llamado a Obama a conmutar la sentencia y dejar en libertad a Manning de inmediato: "Se debe tener clemencia con Bradley Manning en reconocimiento a sus motivaciones para hacer lo que hizo, por el tratamiento que sufrió al ser detenido, y por falencias en el debido proceso ocurridas durante el juicio [...] Bradley Manning actuó creyendo que podría encender la chispa de un debate público constructivo sobre los costos de la guerra, específicamente sobre la conducta de los militares de EE.UU. en Irak y Afganistán. Sus revelaciones incluyeron reportes sobre detenciones en el campo de batalla y grabaciones que no eran conocidas hasta entonces de periodistas y civiles asesinados por ataques desde helicópteros de EE.UU., información que debería ser objeto de escrutinio público sin excepciones. En lugar de 'enviar un mensaje' condenándolo a una sentencia, prácticamente, de por vida, el gobierno de EE.UU. debería enfocarse en investigar las violaciones de derechos humanos y de leyes humanitarias en el contexto de una mal concebida 'guerra contra el terror'." [1]
El veredicto del proceso Ergenekon, dado a conocer el 5 de agosto de 2013 en la prisión de Siliviri, reconoce como culpables del delito de complot contra el Estado y condena a fuertes penas de cárcel a 275 líderes militares, políticos y mediáticos.
Este proceso no responde a las normas de la justicia democrática: se desarrolló con fiscales especiales, ante cortes especiales e incluso en una prisión construida especialmente para su realización. Los numerosos documentos citados, supuestamente ocupados durante varios registros, fueron impugnados como falsos por los acusados. Los testigos citados para autentificar dichos documentos se mantuvieron en el anonimato.
"Ahora Occidente empieza a decir que la democracia no está en las urnas electorales [...], pero sabemos que la voluntad del pueblo se expresa a través de las urnas", dijo el primer ministro turco en una reunión con los miembros de su partido, Justicia y Desarrollo, (conocido con las siglas AKP). "Esto es lo que se ha llevado a cabo en Egipto. ¿Quién está detrás de eso? Israel. Tenemos las evidencias", aseguró Erdogan, citado por 'Hurriyet'.