El Gobierno de Estados Unidos, una puerta giratoria para las Grandes Empresas Agrícolas, está presionando a El Salvador para que adquiera semillas transgénicas, como se sugiere en este artículo:
"Me gustaría decirle al embajador estadounidense que deje de presionar al Gobierno (de El Salvador) para que adquiera semillas mejoradas genéticamente, dijo el Presidente del Centro El Salvadoreño de Tecnologías Apropiadas (CESTA), Navarro, que sólo beneficia a las multinacionales estadounidenses y va en detrimento de la producción local de semillas", informó Sustainable Pulse.A través de la Millennium Challenge Corporation, un "organismo independiente de Estados Unidos de ayuda al desarrollo que está ayudando en la lucha contra la pobreza", como se describe a sí mismo, fundado en 2004, aportando la cantidad de 277 millones de dólares, pero como dice World War 4 Report , "El Ministerio de Agricultura de El Salvador debe continuar con su práctica actual de comprar semillas a los pequeños productores salvadoreños, siguiendo con su Plan de Agricultura Familiar".
La amenaza al parecer se hizo "con la clara intención de promover los intereses de las grandes empresas agrícolas multinacionales".
La distribución de paquetes de semillas en el marco del programa dirigido a los pequeños productores salvadoreños (en lugar de las corporaciones multinacionales como Monsanto) ha impulsado el crecimiento de cultivos para la producción de alimentos básicos y logrando el cultivo de más de 200 mil hectáreas, alcanzando así los objetivos de la Millennium Challenge Corporation (MCC), pero los casi 300 millones de dólares en ayuda podrían ser cancelados debido a que no se están utilizando semillas transgénicas de Monsanto.
Comentario: Está claro que las "ayudas humanitarias" de los EE.UU. o de sus organismos o fundaciones "independientes" y "sin fines de lucro" a países pobres o en vías de desarrollo, son simple y llanamente un medio para extorsionar y manipular a esos países, en exclusivo beneficio de las megacorporaciones con sede en los EE.UU.
Es un hecho indiscutible que las corporaciones manejan a voluntad el gobierno. Organismos gubernamentales como la FDA o la USDA están infestados de ex-miembros de Monsanto y otras multinacionales del rubro. Es ingenuo (como mínimo) pensar que estos sujetos trabajan en beneficio de la gente y el bienestar general. Sus lealtades están siempre con quienes llenan sus bolsillos.