Los Dueños del Circo
En lugar de confirmar la identidad de un objetivo con operadores e informantes en el terreno, la CIA o los militares estadunidenses ordenan un ataque basados en la actividad y localización del celular que creen que usa la persona en cuestión, señala el texto, firmado por Glenn Greenwald, periodista que ha divulgado las filtraciones de Edward Snowden sobre el espionaje global realizado por las autoridades de Washington contra gobiernos, empresas y personas de una multitud de países.
La información fue proporcionada a Greenwald con la condición del anonimato por un ex operador de drones adscrito al Comando Conjunto de Operaciones Especiales (JSOC, por sus siglas en inglés), el cual está a cargo de identificar, capturar o asesinar a sospechosos de terrorismo en Yemen, Somalia, Afganistán y otros países. A decir de ese informante, con el procedimiento tecnológico referido el gobierno estadunidense ha matado a terroristas, pero también a personas inocentes que se encontraban en posesión de los teléfonos celulares espiados.

En 1946, Estados Unidos realizó una serie de pruebas nucleares en el atolón de Bikini, lo que se conoce como la Operación Crossroads. Dos bombas nucleares fueron detonadas para comprobar los efectos que las explosiones nucleares tenían en los buques de guerra. La segunda de ellas, denominada Baker, fue el primer arma nuclear que fue detonada bajo el agua.
La Administración estadounidense ha expresado su preocupación de que estas conferencias pongan en peligro el Tratado de No Proliferación Nuclear de 1986 (TNP), que establece que es ilegal que los Estados que no poseen armas nucleares las fabriquen. Pero el Artículo VI del TNP también exigen a las potencias nucleares que entablen negociaciones para eliminar sus arsenales nucleares.
Entonces, ¿por qué Human Rights Watch (HRW), a pesar de proclamarse a sí misma como "una de las principales organizaciones independientes del mundo" respecto a los derechos humanos, ha mantenido tan sistemáticamente posturas y políticas semejantes a las de los Estados Unidos?
Esta compatibilidad con la agenda del gobierno de EE.UU. no se limita a Latinoamérica. En el verano de 2013, por ejemplo, cuando surgía amenazadoramente la posibilidad de un ataque unilateral con misiles de los EE.UU. a Siria (una evidente violación de la Carta de la O.N.U.), Kenneth Roth, director ejecutivo de HRW, especuló en cuanto a si sería suficiente un bombardeo meramente "simbólico". "Si Obama decide atacar a Siria, ¿se conformará con el simbolismo o hará algo que ayudará a proteger a la población civil?", preguntó por Twitter. John Tirman, director ejecutivo del Centro de estudios internacionales de la universidad Massachusetts Institute of Technology, con presteza denunció el "trino" como "probablemente la declaración más ignorante e irresponsable jamás dada por un importante defensor de los derechos humanos".1
La adaptación de HRW a la política de los EE.UU. se ha extendido también a las extradiciones secretas (la práctica ilícita de secuestrar y transportar a sospechosos de todas partes del mundo para que sean interrogados y a menudo torturados en países aliados). A principios de 2009, cuando se informó que la recién electa administración de Obama iba a dejar intacto este programa, Tom Malinowski, director de cabildeo de HRW en Washington en aquel entonces, sostuvo que "en determinadas circunstancias hay un papel legítimo" de las extradiciones secretas y recomendaba paciencia: "quieren diseñar un sistema que no traiga como consecuencia el envío de personas a calabozos extranjeros para torturarlas", dijo; "sin embargo, el diseño de ese sistema va a tomar un tiempo".2
Los Juegos Olímpicos de Invierno 2014 tendrán lugar a partir del 7 de febrero en Sochi, Rusia. En la preparación de los Juegos Olímpicos no han faltado las críticas en los medios estadounidenses por las violaciones de derechos humanos en Chechenia y Daguestán, la represión en Rusia contra la sociedad civil y, más visiblemente, las recientes leyes rusas criminalizando a gais y lesbianas.
Aunque los medios estadounidenses tienen razón al criticar estas violaciones muy graves de los derechos humanos, no han examinado detenida y continuamente los Juegos Olímpicos cuando han tenido lugar en un país occidental o en el país de un aliado de EE.UU.
Human Rights Watch muestra una vez más que obedece las instrucciones de Washington al documentar las violaciones de los derechos humanos asociados con solo dos Juegos Olímpicos: los de 2008 en Pekín, y los de 2014 en Sochi.
Las feroces críticas de los medios estadounidenses contra eventos oficiales en Estados rivales no son sorprendentes, pero resulta instructiva la metamorfosis de medios importantes en representantes de relaciones públicas cuando aliados de EE.UU. auspician los juegos.
Miles de personas se manifestaron hoy en el centro de Estambul contra el reciente endurecimiento de las leyes de control de Internet y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad que utilizaron grandes cantidades de gases lacrimógenos y cañones de agua a presión para dispersar a los manifestantes.
Según constató Efe en el lugar de los hechos, los manifestantes no pudieron llegar hasta la céntrica plaza Taksim, donde querían protestar, ante el enorme dispositivo de la policía turca, que incluyó carros blindados.
El barrio entero en torno a la plaza y a la calle comercial Istiklal estaba lleno de gases lacrimógenos, mientras que los manifestantes gritaban lemas como "fin a la censura".
Según informó hoy la agencia oficial libia, WAL, cinco periodistas de la televisión estatal "Libya al Wataniya" fueron secuestrados el domingo por desconocidos.
Asimismo, el director de WAL aseguró hoy a Efe que uno de sus redactores, Yunes Ali Yunes, que también trabaja como redactor jefe de la revista "Trípoli", fue asaltado ayer por cinco personas que lo trasladaron a un lugar desconocido.

Los « pacíficos manifestantes » de Kiev preparan un nuevo asalto contra las fuerzas antimotines.
La pregunta se impone cuando vemos la ausencia de reacciones ante las imágenes de manifestantes nazis con cascos y uniformes militares que utilizan incluso catapultas para desatar una lluvia de cocteles Molotov sobre las fuerzas del orden, mientras los comentaristas disertan sobre el carácter supuestamente pacífico y democrático de los manifestantes.
Ucrania está al borde de la guerra civil y, como de costumbre, los medios de prensa occidentales no contribuyen en nada a la comprensión de los hechos. Fuera de las constantes imágenes de enfrentamientos entre la policía antimotines y los temibles militantes nacionalistas en la plaza de la Independencia (Maidan Nezalezknosti), la prensa dominante nos propone únicamente un relato fantástico en 3 capítulos:
Este viernes vence la "tregua" en lo que respecta al límite de deuda. No hay tiempo, el Congreso tiene que actuar y extender de inmediato el techo, alerta Lew.
En realidad, el acuerdo debería llegar antes del viernes, ya que después de esa fecha queda poco tiempo para evitar el default. Utilizando todos los trucos financieros posibles, el país podría hacer frente a los pagos como mucho hasta finales de febrero, alerta Lew. Después de eso la mayor economía del mundo podría entrar en cesación de pagos, con consecuencias imprevisibles para la coyuntura mundial.