¿Una gran conspiración para envenenar el abastecimiento de alimentos? No realmente.
"La dieta, las inyecciones y los mandamientos se combinarán desde una edad muy temprana para producir el tipo de carácter que las autoridades consideran deseable"
~ Bertrand Russell, El impacto de la Ciencia sobre la Sociedad.
Cualquiera que haya echado aunque sea una mirada superficial a lo que pasa por alimento para humanos en estos días no puede más que concluir que literalmente no es apto para el consumo. Aspartamo, BPA, Flúor, GMS (Glutamato monosódico), conservantes, carnes clonadas o irradiadas, cría intensiva, OGMs, colorantes artificiales, sabores artificiales, nanopartículas - la lista de
comidas frankenstein que se nos pide engullir felizmente por nuestras gargantas es interminable y cada vez más espeluznante.
Parece que, día a día, conocemos nuevas historias sobre como los alimentos que ingerimos están siendo pervertidos, de tal modo que se alejan cada vez más de lo que realmente nutre a nuestros cuerpos y, por tanto, afectan nuestra habilidad para pensar, movernos y funcionar en general como deberíamos.
Entonces, uno podría ser perdonado por ver algún tipo de agenda detrás de esta perversión en nuestra comida. ¿Cómo podríamos explicar la corrupción en los ingredientes más esenciales para nuestra salud mental, emocional y física, si no fuera por la existencia de una gran conspiración consciente por parte de la "élite" para controlar a toda la población del planeta? Una población que no está en condiciones de pensar y actuar, no está en condiciones de rebelarse, ¿no es cierto? Seguramente una población que es adicta a los aditivos de los alimentos -e incluso adicta a alimentos naturales como el gluten, la caseína y el azúcar que poseen sustancias que alteran nuestra percepción y nos hacen dependientes de estos alimentos- es una población fácilmente manejable por las maquinaciones de la clase gobernante.
Comentario: Y siguen saliéndose con la suya, torturando a inocentes, en nombre de su falsa "democracia".