Traducido para Rebelión por Silvia Arana© Desconocido
IntroducciónLas revelaciones sobre cómo el gobierno de Obama usa a la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, según sus siglas en inglés) para espiar secretamente las comunicaciones de cientos de millones de ciudadanos de EE.UU. y otros países ha generado denuncias en todo el mundo. En EE.UU. no hubo ninguna protesta masiva, a pesar de la amplia cobertura periodística y de la oposición de las organizaciones pro libertades civiles.
Los líderes del Congreso, tanto del partido demócrata como del republicano, al igual que los jueces más importantes aprobaron un programa de espionaje doméstico sin precedentes... Aún peor, cuando se hicieron públicas las operaciones de espionaje a gran escala, los líderes principales del Senado y del Congreso reafirmaron su respaldo a todas y a cada una de las intromisiones en las las comunicaciones electrónicas y escritas de ciudadanos estadounidenses. El presidente Obama y su fiscal general Holder defendieron firme y abiertamente las operaciones globales de espionaje de la NSA.Las cuestiones que surgen de este vasto aparato policíaco secreto y de la penetración y control que ejerce sobre la sociedad civil, atentando contra la libertad de expresión de los ciudadanos, va mucho más allá de meras "violaciones de la privacidad", como la calificaron muchos expertos legales.La mayoría de los defensores de las libertades civiles se enfocan en las violaciones de los derechos individuales, garantías constitucionales y derechos a la privacidad de los ciudadanos. Estas son cuestiones legales importantes y esta postura es correcta. Sin embargo, las críticas constitucionales-legales no van lo suficientemente lejos: no tocan los temas fundamentales; evitan hacer cuestionamientos políticos básicos.
¿Por qué un aparato tan masivo de espionaje global manejado por el estado policial se volvió tan esencial para el régimen gobernante? ¿Por qué el conjunto de los líderes de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial hicieron declaraciones públicas en las que repudiaron todas las garantías constitucionales de manera tan descarada? ¿Por qué los dirigentes electos defendieron el espionaje político global contra la ciudadanía? ¿Qué tipo de políticos existen en un estado policial? ¿Qué tipo de políticas de largo término, de gran escala, a nivel interno e internacional son ilegales e inconstitucionales como para justificar el desarrollo de una vasta red de espionaje doméstico y una infraestructura de tecno-espionaje de billones de dólares manejada por el estado corporativo en una época de "austeridad" presupuestaria caracterizada por los recortes en los programas sociales?
Comentario: Una vez más, se justifica la vulneración del derecho a la intimidad alegando que con el espionaje en internet se evitan atentados terroristas. Paso a paso, el mundo orwelliano se vuelve más transparente