La fiscalía de Milán ha destapado una red de piratas informáticos y antiguos funcionarios gubernamentales, que habrían utilizado malware y contactos internos para poder acceder a varias bases de datos confidenciales del gobierno italiano, incluyendo al ministerio del Interior.
La presidenta de Italia, Giorgia Meloni
Este grupo de "piratas informáticos" habría accedido, supuestamente, a más de
800.000 registros confidenciales. Incluso, señalan fuentes de la
Fiscalía, habrían podido acceder a cuentas vinculadas a la oficina de
Presidencia del Gobierno."Ningún Estado de derecho puede tolerar esto"La primera ministra, Giorgia Meloni ha comparecido públicamente para manifestar su rechazo ante lo sucedido. Considera que "ningún Estado de derecho puede tolerar esto". La propia fiscalía considera que supone "un ataque a la democracia".