Fuego en el Cielo
Un fuerte estampido y una "explosión" que sacudieron Feilding el miércoles por la mañana son probablemente trozos ardientes de asteroides que entran en la atmósfera, afirma un astrónomo planetario.
El suceso sobre el distrito de Manawatū tiñó las nubes de naranja, e hizo que los residentes se preguntaran si se había producido una explosión o un terremoto.
Kath Hopping dijo que estaba sentada fuera de su casa antes de su carrera matutina sobre las 6.50 de la mañana cuando una "explosión en el cielo" sacudió su casa y la detuvo.
Dijo que sonaba como si un camión cisterna de gas hubiera explotado cerca, o pensó que podría haber habido un terremoto, pero no pudo ver nada cerca, y fue a comprobar su cámara de seguridad.
Recibimos 412 informes sobre una bola de fuego vista sobre Assia, Baden-Württemberg, Bavaria, Bavorsko, Bayern, Bern, Berne, Bourgogne-Franche-Comté, Bremen, Drenthe, Emilia-Romagna, Freiburg, Friuli-Venezia Giulia, Gelderland, Genève, Grand Est, Hessen, Limburg, Ljubljana, Lombardia, Lombardy, Lower Austria, Marche, Neuchâtel y Nie el lunes 26 de junio de 2023 alrededor de las 20:45 UT.
Para este evento, hemos recibido 2 vídeos y una foto.
Recibimos 16 reportes sobre una bola de fuego vista sobre AZ, CA y NV el viernes 23 de junio de 2023 alrededor de las 09:39 UT.
Para este evento, recibimos 4 videos y una foto.
La brillante bola de fuego que se muestra en este vídeo fue grabada en la noche del 11 de junio, a la 1:54 (hora local peninsular española). Su brillo fue equivalente al de la Luna llena.
El análisis del evento ha sido realizado por el el astrofísico José María Madiedo, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y director del proyecto SMART. Este análisis ha revelado que el fenómeno tuvo lugar al entrar en nuestra atmósfera una roca a una velocidad de unos 67 mil kilómetros por hora. La roca procedía de un cometa. Estas rocas que se cruzan con la órbita de la Tierra reciben el nombre de "meteoroides". El brusco rozamiento con la atmósfera de la Tierra a esta gran velocidad dio lugar a que la superficie de la roca (el meteoroide) se calentase hasta alcanzar una temperatura de varios miles de grados centígrados y se volviese incandescente, generándose así una bola de fuego que sobrevoló el mar Mediterráneo. Se inició a una altitud de unos 104 km sobre el mar. Desde allí avanzó hacia el noreste, extinguiéndose finalmente a una altitud de unos 74 km sobre el Mediterráneo. Destacó por mostrar varias explosiones a lo largo de su trayectoria y una intensa explosión final. Estas explosiones, que se debieron a diversas rupturas bruscas de la roca, provocaron aumentos súbitos de luminosidad.