Fuego en el Cielo
Que un objeto volador similar a una bola de fuego naranja cruzó el cielo de esa ciudad, desde el sudoeste hacia el este, pero no se pudo establecer el origen del fenómeno. Fuentes policiales confirmaron que a las 2.30 de la madrugada, el Sistema de Emergencias 911 recibió numerosos llamados de distintas zonas de la ciudad que reportaron la visión de un objeto indefinible, similar a una bola de fuego,sobrevolando el cielo.
Las denuncias coincidían en señalar que el objeto circuló desde la zona sur hacia el este de la ciudad, y que desapareció detrás del cerro San Bernardo, dejando una estela en el cielo. Personal policial se movilizó por la zona, sin poder hallar ningún objeto ni una pista en la zona que explicará el origen del fenómeno.
Los habitantes se comunicaron con distintas emisoras radiales para describirel fenómeno, que también se observó en otras localidades como Cachi y El Carril, y la zona del dique Cabra Corral.
Asteroide | Fecha(UT)
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Distancia
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Mag.
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Tamaño
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2011 HC24 | May 12
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5.9 LD
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58 m
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2002 JC | Jun 1
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57.5 LD
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1.6 km
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2009 BD | Jun 2
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0.9 LD
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10 m
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2002 JB9 | Jun 11
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71.5 LD
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3.2 km
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2001 VH75 | Jun 12
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42.2 LD
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1.1 km
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2004 LO2 | Jun 15
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9.9 LD
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48 m
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2011 GA55 | Jul 6
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64.1 LD
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1.0 km
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2011 EZ78 | Jul 10
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37.3 LD
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1.6 km
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2003 YS117 | Jul 14
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73.9 LD
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1.0 km
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2007 DD | Jul 23
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9.3 LD
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31 m
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2009 AV | Aug 22
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49.7 LD
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1.1 km
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2003 QC10 | Sep 18
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50 LD
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1.2 km
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2004 SV55 | Sep 19
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67.5 LD
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1.2 km
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El Hemisferio sur de la Tierra, pero en especial algunos países de América del Sur, como la Argentina, fueron testigos privilegiados del paso de la lluvia de estrellas fugaces, piezas del cometa Halley, cuya estela una vez más volvió a pasar cerca de la atmósfera terrestre.
La Oficina de Meteoritos de la NASA había informado del paso del cometa, que hace 25 años maravilló al mundo cuando fue completamente visible. La próxima vez que un hecho de esta magnitud sucederá será dentro de 51 años.
Según ha informado este viernes la UJA, a las doce y once minutos de la noche del pasado 28 de abril, un brillante meteoro surcó el cielo de Jaén y su impresionante traza fue registrada por la cámara tipo 'All-Sky', situada en el Observatorio.

Investigadores locales informaron que este extraño fenómeno se presentará los días viernes y sábado, reportándose una frecuencia de 40 meteoritos por hora.
El extraño fenómeno, ocasionado por la basura cósmica dejada por el cometa Halley, volvería a presentarse en el año 2061, informó un grupo de investigadores del Instituto Tecnológico de Mérida (ITM).
De acuerdo a los cálculos realizados por los científicos locales, se espera que la lluvia tenga una intensidad de hasta 40 meteoros por hora, por lo que se invitó a la ciudadanía a alejarse de la contaminación lumínica y a extremar precauciones.
En el año 2010, la entidad del sureste mexicano presenció una lluvia de estrellas de similares características, cuando del 11 al 13 de agosto se pudo apreciar en el firmamento la caída de un meteorito por segundo, fenómeno astronómico conocido como "Perseidas" y que fue ocasionado por la basura cósmica arrojada por el cometa Swift Tuttle 1862 II.
De acuerdo a Eddie Ariel Salazar Gamboa, investigador y catedrático del ITM, cada año se presentan 29 "lluvias de estrellas", de las cuales tres son las más copiosas, tales son los casos de "Perseidas", las "Oriónidas" vistas en octubre y "Gemínidas", en diciembre.
"La primavera es la temporada de las bolas de fuego", según Bill Cooke, científico de la Oficina de Meteoritos de la NASA, ya que, "por razones que aún no se conocen plenamente, la tasa de meteoritos brillantes, conocidos como bolas de fuego, aumenta considerablemente" durante la estación.
A lo largo del año, si alguien permanece toda la noche observando el espacio podrá ver alrededor de diez bolas de fuego, siempre fugaces. Se trata de meteoritos con un alto brillo que supera incluso al del planeta Venus. El bombardeo corre paralelamente al avance de la Tierra por zonas del espacio en las que hay concentraciones significativas de rocas y objetos siderales menores.
Hasta ahí, nada extraño. Pero resulta que las bolas de fuego son más abundantes durante la primavera. La tasa, por noche, se incrementa misteriosamente hasta un 30%. "Sabemos de este fenómeno desde hace más de 30 años", dice Cooke "y no son sólo las bolas de fuego las que se ven afectadas, sino también las caídas de meteoritos que alcanzan el suelo".
Se asume que los astrónomos han catalogado meticulosamente las órbitas de los meteoritos. Lo que es una triste falacia: sólo hemos determinado unos 77 del millar que se entrecruzan en nuestra órbita planetaria. También tenemos la noción candorosa de que podemos descartar el peligro de esta catástrofe utilizando nuestros cohetes atómicos. Pero es imposible divisar los meteoritos que provienen de la dirección del Sol, y es un error asumir que podremos hacer los descubrimientos a tiempo, como demostró el caso del asteroide 2011 GP59, que pasó hace pocos días cerca de nuestro planeta sin haber sido detectado antes.
Estos cuerpos cósmicos, potencialmente invisibles, se desplazan a velocidades infernales de hasta 65 kilómetros por segundo, por lo que desde el momento en que detectemos uno de esos asesinos hasta su impacto con el planeta, no pasarían 24 horas.