El Niño de la Sociedad
Manchester, sin embargo, la tercera mayor ciudad británica, con 2,6 millones de habitantes en el noroeste de Inglaterra, experimentó sus peores disturbios en 30 años, según la policía.
Cientos de encapuchados saquearon comercios de ropa y tecnología y sostuvieron escaramuzas con la policía de Manchester durante horas hasta avanzada la madrugada del miércoles.
La policía informó que arrestó a 47 agitadores en Manchester y en su área metropolitana.
Otras ciudades inglesas fueron escenario de incidentes esporádicos: Liverpool (noroeste), Brimingham, Leicester y Nottingham (estas tres en el centro)
En esta última ciudad, los agitadores incendiaron con cócteles molotov un colegio y una comisaría.
En la capital, la Scotland Yard informó que 685 personas han sido arrestadas en relación con la violencia de los últimos cuatro días.
Este martes se informó de la muerte de un joven de 26 años por disparos recibidos el día anterior en Croydon, en el sur de Londres, convirtiéndose en la primera víctima mortal de los disturbios.
Fuera de Inglaterra, en Glasgow, dos adolescentes comparecerán el miércoles ante el juez porque supuestamente publicaron mensajes en Facebook en los que incitaban a la violencia.
Según un estudio realizado por el Dr. Larry Rosen, especialista del área de psicología de la Universidad Estatal de California, Domingues Hills, los jóvenes y adolescentes que invierten mucho tiempo en redes sociales, principalmente Facebook, pueden presentar trastornos en su vida cotidiana, como la pérdida de sueño, ansiedad, niveles altos de depresión y tendencias agresivas, además de convertirse en personas más narcisistas y con alta probabilidad de caer en problemas de adicciones como alcoholismo y drogadicción.
La investigación arrojó que en promedio los jóvenes y adolescentes envían 2 mil mensajes de texto al mes que pueden derivan en problemas de comunicación con su familia e incluso el desarrollo del síndrome del túnel carpiano, una neuropatía periférica que podría derivar en la paralización de los nervios de la mano.
No sólo algunos de esos padres estaban en los disturbios, sino que muchos de los que participaban no eran los delincuentes juveniles encapuchados a los que muchos han culpado de las peores revueltas que ha visto Reino Unido en décadas.
"Algunos de los padres estaban allí. Para algunos padres no fue una gran sorpresa que sus hijos estuvieran allí. Han pasado por esto toda su vida", comentó un hombre afrocaribeño, de 22 años y que se identificó como "L", expresando la frustración y la ira que sienten padres y jóvenes sobre las crecientes desigualdades de riqueza y oportunidades.
"Hoy estaba en el tren con mi ropa y mis zapatos de trabajo", indicó. "El hombre a mi lado estaba diciendo que todos los que hubieran estado en las protestas deberían ser gaseados. El nunca habría adivinado que yo estaba allí, que participé", agregó.
Cuatro muertos y más de mil detenidos en el Reino Unido por la violencia
Cuatro personas han resultado muertas y más de mil han sido detenidas en el Reino Unido por la violencia callejera sin precedentes que comenzó el sábado en Londres, según datos facilitados hoy por la policía.
Si bien Londres vivió una madrugada de relativa calma después de tres jornadas de graves disturbios, en otras ciudades británicas se registraron altercados en las últimas horas, entre ellas Manchester y Liverpool, al norte, y Birmingham y Nottingham, en el centro.
En Birmingham, tres personas fallecieron al ser atropellados por un vehículo la pasada madrugada mientras protegían su vecindario, en un incidente por el que un hombre ha sido detenido, de acuerdo con la policía.

Manifestantes participan en una cacerolada en apoyo a los miles de estudiantes universitarios, de secundaria y de otros sectores sociales que hoy, martes 9 de agosto de 2011, marcharon por el centro de Santiago de Chile en un paro nacional convocado para demandar una educación pública, gratuita y de calidad. Más de 100.000 personas se manifestaron en varias ciudades chilenas, incluyendo Santiago, donde grupos de encapuchados protagonizaron disturbios, en una nueva jornada de paro.
"La pregunta de fondo es si necesitamos convocar más marchas, porque sabemos que la gente se va a aprovechar, que va a haber grupos minoritarios. Yo no quiero asignarle a los organizadores la responsabilidad de los destrozos, pero saben que cuando uno convoca se sobrepasa", afirmó Ubilla.
El gobierno reiteró hoy el llamado al diálogo sobre las propuestas realizadas, cuando se cumple el plazo fijado por estudiantes para la entrega de una nueva iniciativa.
Las pruebas se obtuvieron en un partida de 20 toneladas importadas por las Cooperativas Agrarias de Rogaland y Agder desde los EE.UU. Esta variante de arroz no está autorizada ni en Noruega ni en Europa.
Si no estás dispuesto a equivocarte, nunca llegarás a nada original.Eduardo Punset:
Ken Robinson
Hace muchos años leí algo tuyo que me fascinó, porque pensé que nadie había dicho antes algo tan sencillo y tan cierto. Dijiste que elevar los estándares de educación no sirve de nada si los estándares en cuestión no son válidos o son incorrectos. Y desde entonces, he intentado leer todo lo que has escrito, como Out of Our Minds, por ejemplo. ¿Podrías explicarles a los teleespectadores tu punto de vista?
Ken Robinson:
Mi experiencia es que la mayor parte de nuestros sistemas educativos están desfasados. Son anacrónicos. Se crearon en el pasado, en una época distinta, para responder a retos diferentes. Con el tiempo, se han vuelto cada vez más limitados. En todas partes del mundo hay intentos de reformar la educación, y uno de los grandes mantras es que hay que elevar los estándares. Y me hace gracia, porque ¡por supuesto que deberíamos mejorarlos siempre! ¡pero no sirve de nada aumentarlos si están equivocados! Por ejemplo, en la mayoría de sistemas, se insiste mucho en elevar los estándares de matemáticas y de lengua, que por supuesto son muy importantes, ¡pero no son lo único que cuenta en la educación! Las disciplinas artísticas cuentan, las humanidades cuentan, la educación física también...
Un total de 1.335 personas han sido detenidas en el Reino Unido (al menos 850 en Londres) a causa de la ola de violencia callejera iniciada el sábado pasado en el barrio de Tottenham. Además, según informó la Policía Metropolitana, 251 arrestados ya han sido acusados formalmente.
"Los disturbios que observamos son producto de la 'separación masiva' propia de la sociedad británica", opinó el periodista Ben Cohen en su análisis de las causas de la ola de violencia que está azotando el Reino Unido.
Hace un año Gladis llegó de Gran Bretaña, donde no tiene ni parientes ni amigos, a la isla de Tasmania donde viven sus hijos. La mujer se vio obligada a trasladarse después de que su estado de salud empeorara. Una vez expirado el visado de invitado, los oficiales se negaron a prorrogarlo, lo que supone la deportación.
Según explicaron las autoridades, Gladis no cumple con los requisitos médicos necesarios para recibir el visado, lo que significa que su presencia en el país será una carga para los contribuyentes australianos a pesar de que la anciana recibe una pensión y tiene sus propios ahorros.