Durante un acto en que promulgó una ley sobre calidad educativa -ya rechazada por los estudiantes-, el mandatario chileno ratificó su postura de no ceder a los reclamos de un sistema con escuelas y universidades públicas y gratuitas que generó multitudinarias marchas en las últimas semanas.© AFPUn joven es golpeado y apresado por los carabineros en la manifestación del 4 de agosto
Por su parte, los estudiantes y profesores adelantaron que no participarán de la mesa de diálogo convocada por el gobierno y reafirmaron su idea acerca de que una consulta popular podría zanjar la crisis.
El argumento de Piñera para no ceder es escueto: "
Todos quisiéramos que la educación, la salud y muchas cosas más fueran gratis para todos, pero al fin y al cabo nada es gratis en esta vida" y por lo tanto "
alguien lo tiene que pagar", dijo durante un acto en La Moneda.
Es más, fundamentó que "si se le da educación gratuita al 10 por ciento más favorecido de nuestra sociedad, lo que estaríamos haciendo es que el total de la sociedad, incluyendo a los más pobres, con sus impuestos estarían financiando la educación de los más afortunados".
"Quisiera ver la otra cara de estas nueve semanas de movilizaciones", enfatizó Piñera, quien afirmó que con los manifestantes "son muchas más las coincidencias que las diferencias en materia de educación" porque "encontrar las diferencias es muy fácil; basta mantener actitudes maximalistas, extremistas o intransigentes".