El desplazamiento de la carga, probable causa del hundimiento del "Mar Nosso", con base en Marín, que salió de Avilés para cerrar la costera de la xarda.

© DesconocidoTres pescadores portugueses murieron ahogados y otros dos permanecen desaparecidos.
Tres pescadores portugueses murieron ahogados y otros dos permanecen desaparecidos (cuya búsqueda se ha reanudado esta mañana) al hundirse a veinte millas de la costa de Navia el arrastrero luso "
Mar Nosso", matriculado en Viana do Castelo, al norte de Oporto, pero con base en el puerto pontevedrés de Marín (Pontevedra).
Otros siete pescadores, cinco gallegos y dos portugueses, lograron sobrevivir tras permanecer unas dos horas en el mar a la espera de que llegase ayuda. Y es que el barco se hundió sin que se activase la radiobaliza de emergencia. La llegada de otro pesquero luso que faenaba en la zona, el "
Mar da Galega", evitó que los supervivientes perdiesen también la vida. Se trata del segundo arrastrero gallego de bandera portuguesa que se hunde en las costas asturianas en el plazo de cuarenta días, después del naufragio del "
Santa Ana", con ocho fallecidos.
Comentario: El índice de suicidios en el ejército norteamericano no es algo nuevo y es algo que ha ido produciéndose desde que se empezó la cruzada contra el terrorismo tras el atentado de las torres gemelas.
Las explicaciones que dan desde la oficialidad al respecto lo cierto es que dejan mucho que desear, y dadas las diversas denuncias del maltrato y violaciones de los derechos humanos que parece cometer el ejército estadounidense por activa y por pasiva, tal vez podríamos preguntarnos si los motivos de tales suicidios no estarían mas bien relacionados con los actos y barbaries que los soldados se ven obligados a cometer en nombre de su país.
Tal vez lo que estos suicidios demuestren es la prueba de que los seres humanos que componen dicho ejército se ven obligados a hacer cosas antihumanas, que posteriormente les pasan factura a nivel psicológico y que en determinados casos les conduce al suicidio. Poniendo de manifiesto una vez más que a los dirigentes de EE.UU. no les importan ni sus propios hombres.