OF THE
TIMES
"El proyecto arqueológico estaba financiado por el Estado desde el año pasado y tenía una duración prevista de cuatro años y medio. Nadie esperaba que lo detuvieran y mucho menos, las 32 personas que trabajaban en el yacimiento y que tenían ese empleo como principal entrada de ingresos", explicó a RT María Rosales, vicepresidenta de la asociación Kapaq Sumaq Ayllu, que desde hace 14 años ayuda a proteger el patrimonio cultural del Perú.