Se llamaba Génesis Carmona y tenía 22 años. Estaba en la manifestación antigubernamental en la ciudad de Valencia. Había sido reina de Turismo de Carabobo.
© Desconocido
Génesis Carmona, una miss venezolana de 22 años, ha muerto este miércoles en la ciudad de Valencia tras recibir un balazo este martes en una protesta contra el Gobierno, según confirmó uno de los médicos que la atendió.
"Fue intervenida quirúrgicamente ayer, pero su evolución no fue satisfactoria. Murió hoy a las 12.15 (hora local, 16.45 GMT)", dijo el médico Carlos Rosales, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Guerra Méndez de Valencia (centro), donde Carmona permanecía hospitalizada.
La muerte de Carmona, de 22 años y elegida el año pasado como Miss Turismo del estado central Carabobo, eleva a cuatro el número total de víctimas fatales producto de las protestas iniciadas hace una semana en Venezuela.
Comentario: Venezuela está transitando momentos dramáticos. Los recientes eventos nos ofrecen la oportunidad de observar cómo es que los hechos nunca son blanco o negro, ni buenos contra malos.
En la Venezuela convulsionada de estos últimos días puede verse a un pueblo dividido. Hay partidarios del chavismo que genuinamente apoyan al movimiento, en buena medida porque gracias a él salieron de una situación de marginación y pobreza; al mismo tiempo, gran parte de estos partidarios están siendo manipulados por el propio Gobierno venezolano como fuerza motriz para mantener limpia la imagen de una Venezuela en crisis, una Venezuela que está enfrentando las consecuencias de las prácticas demagógicas, el abuso de Poder y el hostigamiento y la censura a todo aquel
que pensara distinto al movimiento chavista.
Por otro lado, la otra facción, la de los opositores, aquellos que el Gobierno acusa de "fascistas", tiene en sus filas sujetos que justificadamente alzan su voz para protestar contra los abusos, la corrupción y la falta de juicio del Gobierno actual. Al igual que la mitad chavista, el bando disidente también está siendo utilizado por élites conservadoras locales y extranjeras
vinculadas a la CIA y a
grandes corporaciones que desde hace años quieren echar sus garras sobre los recursos venezolanos.
Mantengan los ojos bien abiertos y eviten posicionarse y tomar partido, simplemente, por un bando u otro.
Comentario: Venezuela está transitando momentos dramáticos. Los recientes eventos nos ofrecen la oportunidad de observar cómo es que los hechos nunca son blanco o negro, ni buenos contra malos.
En la Venezuela convulsionada de estos últimos días puede verse a un pueblo dividido. Hay partidarios del chavismo que genuinamente apoyan al movimiento, en buena medida porque gracias a él salieron de una situación de marginación y pobreza; al mismo tiempo, gran parte de estos partidarios están siendo manipulados por el propio Gobierno venezolano como fuerza motriz para mantener limpia la imagen de una Venezuela en crisis, una Venezuela que está enfrentando las consecuencias de las prácticas demagógicas, el abuso de Poder y el hostigamiento y la censura a todo aquel que pensara distinto al movimiento chavista.
Por otro lado, la otra facción, la de los opositores, aquellos que el Gobierno acusa de "fascistas", tiene en sus filas sujetos que justificadamente alzan su voz para protestar contra los abusos, la corrupción y la falta de juicio del Gobierno actual. Al igual que la mitad chavista, el bando disidente también está siendo utilizado por élites conservadoras locales y extranjeras vinculadas a la CIA y a grandes corporaciones que desde hace años quieren echar sus garras sobre los recursos venezolanos.