Historia Secreta
Unas recientes excavaciones que permitieron desenterrar y comenzar a investigar en Uruguay restos óseos de animales con 29.000 años de antigüedad podrían echar por tierra la teoría de que el poblamiento de América se produjo a través del estrecho de Bering hace unos 12.000 años.
Según un comunicado emitido hoy por la Presidencia uruguaya, un equipo de expertos de la Facultad de Ciencias de la Unidad de la República comenzó este año a excavar una zona en la que hace varios años fue detectada la presencia de fósiles de varios animales prehistóricos.
"En esta primera excavación descubrimos, en el lecho del arroyo, miles de huesos pertenecientes a entre ocho y diez gliptodontes, perezosos y un toxodonte en un solo lugar" en un estado de conservación "maravilloso", aseguró Richard Fariña, que encabeza el grupo de paleontólogos.
Si bien los vestigios de los Incas son asombrosos, tal como lo es Machu Picchu, son aún más impactantes las costumbres y secretos que se han venido descubriendo de la vida diaria de esta civilización. Una de las curiosidades que se destacan son las ceremonias fúnebres, sobre las cuales Nydia Gómez Leal, historiadora de la Universidad Nacional de Colombia, cuenta que si se era una persona de élite, el día de la muerte se sacrificaba a sus mujeres y sirvientes para que fueran a servir en la otra vida. "Cuando murió Huayna Cápac, undécimo y penúltimo gobernante del incanato, mataron más de 1.000 personas".
Gómez explica que esto se debía a que los hombres ricos y poderosos se les honraba en vida, por esta razón "los muertos debían estar a gusto en su nueva morada, o quizá regresarían a llevarse a algún pariente para que les acompañara".
Un equipo de científicos en El Salvador dice que ha descubierto mazorcas de maíz, pedazos de madera, caminos y zanjas muy bien preservadas en un sitio arqueológico, después que una erupción volcánica violenta cubrió el área cerca del año 630.
Liderados por el antropólogo estadounidense Payson Sheets, un equipo de estudiantes de la Universidad de Colorado ha estado trabajando en la zona Joya de Ceren, al noroeste de San Salvador, durante aproximadamente tres semanas.
El profesor Sheets dijo que "no hay ningún sitio arqueológico en el mundo que tenga preservados materiales orgánicos de una manera tan maravillosa. No es un área donde vivía el elite, eran solamente plebeyos, agricultores, artesanos, hacían muchas cosas; cerámicas, barcos, herramientas y sus propias casas".
Siguió diciendo que "estamos descubriendo por primera vez la alta calidad de vida que tenían los plebeyos hace 1.400 años aquí mismo en esta área".
Las mazorcas de maíz que medían 20 centímetros de largo y 6 centímetros de ancho fueron encontrados hasta cinco metros debajo de la tierra.

Los gobernantes de estas complejas sociedades se encargaban de los rituales, la administración de la economía y la política
El especialista explicó que el número de julio de Arqueología Mexicana, dedicado a las ciudades mayas del período clásico (250-900 d. C.), muestra detalladamente la vida de las cortes de los gobernantes de Yaxchilan, Calakmul, Palenque, Toniná, Copán, Tikal, entre otras.
Señaló que dos períodos mayas se conocen ampliamente, la etapa de la conquista a través de los relatos de los cronistas, y el del clásico maya por sus registros en glifos en piedra y cerámica que "nos permiten conocer a detalle fechas como el nacimiento, muerte, entronización y relaciones de parentesco".
El arqueólogo recordó que el investigador soviético Yuri Knorosov (1922-1999) descifró la escritura jeroglífica maya y que a partir de su trabajo se pudo empezar a conocer el sentido de las inscripciones mayas y a través de ellas todas las "historias de los gobernantes".
"Entre los diseños simbólicos de estas representaciones sobre rocas de origen volcánico destacan volutas, grecas, espirales, discos solares, motivos serpentinos, entre otros", señaló el organismo.
Algunas de estas figuras coinciden con características de la cerámica ritual de la cultura aztatlán, que vivió en esta zona de la franja costera noroccidental de Nayarit entre 850/900 y 1350 d.C.
El arqueólogo Mauricio Garduño confirma esta idea: "Varios de los petroglifos recientemente localizados, pueden coincidir en temporalidad con evidencias de la cultura aztatlán, particularmente con su cerámica, cuyos diseños son semejantes a las decoraciones de objetos rituales, caracterizadas por representaciones de bandas celestes, nubes y motivos ligados al culto solar".
Piedras preciosas, oro y plata forman parte del tesoro que se halló en el templo Sree Padmanabhaswamy. Se cree que los objetos estuvieron languideciendo en las bóvedas del templo por más de un siglo. Las piezas no han sido oficialmente valoradas debido a que los inspectores se encuentran haciendo un inventario de lo hallado. Se cree que dicha labor tomará al menos una semana más.
Aunque no es oficial, se estima que el tesoro podría estar valorado en más de 25.000 millones de rupias, unos US$500 millones. Historiadores indicaron, sin embargo, que es sumamente difícil determinar el valor real de dichos objetos. El descubrimiento hizo que la seguridad alrededor del templo se fortalezca.
"Le he pedido al jefe de la policía que, tras los hallazgos, refuerce la seguridad y que los agentes desplegados para tal fin se queden permanentemente", señaló Oomen Chandy, ministro en jefe de ese estado.
En el evento participan más de 40 expertos en paleontología y ciencias afines de Rusia, Alemania, Japón, China, EE. UU., Francia, la República Checa y Croacia, y proseguirá hasta el 9 de julio.
El simposio está dedicado a la 'tercera especie' de ser humano, bautizada como homínido de Denísova, que vivió hace más de 40.000 años en el territorio de la región de Altái, y según su manera de andar se asemejaba a los deportistas que practican pedestrismo.
Según los autores del artículo sobre el tema publicado en la revista Nature, los especialistas hallaron como objeto de estudio una falange del pie izquierdo. Tras confirmarse que la especie ocupa una posición media entre neandertales y los primeros hombres modernos, los científicos dicen que las particularidades del hueso "atestiguan el carácter del movimiento del homínido, parecido al pedestrismo".
Se trata de una región prácticamente desconocida para la arqueología nacional y extranjera, destacó la responsable del proyecto, Stacie M. King, citada el domingo por el diario local "La Crónica de Hoy".
Al dar a conocer los avances de esos hallazgos durante las VI Mesas Redondas de Monte Albán, M. King explicó que los trabajos cuentan con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México.
La especialista señaló que se ha encontrado evidencia de presencia humana en esas montañas, desde al menos 1.000 años antes de Cristo.
"Es una región prácticamente desconocida para la arqueología, fuera de los grandes centros urbanos que son conocidos", precisó la doctora en Antropología de la Universidad de Indiana, Estados Unidos.
La especialista construyó su investigación con el apoyo de documentos antiguos, recopilación de testimonios de los actuales habitantes y con investigaciones y excavaciones en ese sitio, que incluye fortalezas y unidades habitacionales enclavadas en riscos y montañas.
En el estómago de esta momia natural, de más de 5.300 años de edad, los expertos encontraron "restos muy grasos con parte de músculo que hacen pensar que se trata de cabra montesa", precisó el conservador del museo Eduard Egarter Vigl en una entrevista a la agencia de prensa austriaca APA.
Otzi probablemente comió por última vez unos 30 a 45 minutos antes de su muerte, precisó. Contrariamente a una evaluación precedente, los investigadores también descubrieron huellas de caries en los dientes.
Los resultados completos del análisis, realizado por endoscopia, serán divulgados durante un congreso a mediados de octubre.
Varios institutos de investigación, de Bolzano (norte), Innsbruck (oeste de Austria), Magdeburgo (este de Alemania) o Burdeos (suroeste de Francia) participaron en el examen del estómago, precisó Egarter Vigl.
"Lo que hemos visto son los restos del marsupial más grande que habitó el planeta, una bestia de tres toneladas de peso que se paseó por estas tierras hace 50.000 a dos millones de años", dijo Michael Archer, uno de sus descubridores, a la emisora local ABC.
El equipo del profesor Archer desenterró los restos del también llamado "wombat gigante" en la remota localidad de Bruketown, situado en el estado australiano de Queensland.
El diprotodonte era un marsupial de la era del Pleistoceno que caminaba en cuatro patas y se parecía en apariencia al wombat, aunque tenía tamaño de un rinoceronte o un hipopótamo.
Estos animales de unos tres metros de largo y unos dos metros de altura tenían un par de incisivos salidos pero eran herbívoros y habitaban en los bosques abiertos y llanos semiáridos de Australia.