Historia Secreta
Se trata de una región prácticamente desconocida para la arqueología nacional y extranjera, destacó la responsable del proyecto, Stacie M. King, citada el domingo por el diario local "La Crónica de Hoy".
Al dar a conocer los avances de esos hallazgos durante las VI Mesas Redondas de Monte Albán, M. King explicó que los trabajos cuentan con la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México.
La especialista señaló que se ha encontrado evidencia de presencia humana en esas montañas, desde al menos 1.000 años antes de Cristo.
"Es una región prácticamente desconocida para la arqueología, fuera de los grandes centros urbanos que son conocidos", precisó la doctora en Antropología de la Universidad de Indiana, Estados Unidos.
La especialista construyó su investigación con el apoyo de documentos antiguos, recopilación de testimonios de los actuales habitantes y con investigaciones y excavaciones en ese sitio, que incluye fortalezas y unidades habitacionales enclavadas en riscos y montañas.
En el estómago de esta momia natural, de más de 5.300 años de edad, los expertos encontraron "restos muy grasos con parte de músculo que hacen pensar que se trata de cabra montesa", precisó el conservador del museo Eduard Egarter Vigl en una entrevista a la agencia de prensa austriaca APA.
Otzi probablemente comió por última vez unos 30 a 45 minutos antes de su muerte, precisó. Contrariamente a una evaluación precedente, los investigadores también descubrieron huellas de caries en los dientes.
Los resultados completos del análisis, realizado por endoscopia, serán divulgados durante un congreso a mediados de octubre.
Varios institutos de investigación, de Bolzano (norte), Innsbruck (oeste de Austria), Magdeburgo (este de Alemania) o Burdeos (suroeste de Francia) participaron en el examen del estómago, precisó Egarter Vigl.
"Lo que hemos visto son los restos del marsupial más grande que habitó el planeta, una bestia de tres toneladas de peso que se paseó por estas tierras hace 50.000 a dos millones de años", dijo Michael Archer, uno de sus descubridores, a la emisora local ABC.
El equipo del profesor Archer desenterró los restos del también llamado "wombat gigante" en la remota localidad de Bruketown, situado en el estado australiano de Queensland.
El diprotodonte era un marsupial de la era del Pleistoceno que caminaba en cuatro patas y se parecía en apariencia al wombat, aunque tenía tamaño de un rinoceronte o un hipopótamo.
Estos animales de unos tres metros de largo y unos dos metros de altura tenían un par de incisivos salidos pero eran herbívoros y habitaban en los bosques abiertos y llanos semiáridos de Australia.
Según los expertos, los esqueletos tienen más de 1.000 años de antigüedad y 66 de ellos estaban depositados en urnas, mientras que los 50 restantes se encontraron alrededor de ellas.
Además se encontraron instrumentos y figuras asociados a los entierros como silbatos y objetos que representaban a animales, hombres y mujeres.
Comentario: Este artículo de BBC Mundo hacer alusión al "Calentamiento Global". En SOTT hemos manifestado en varias ocaciones nuestra opinión al respecto. Los invitamos a leer nuestra editorial "El calentamiento global y la corrupción de la ciencia" para una mayor comprensión de la farsa tras esta teoría.

La Península Antártica estuvo cubierta por vegetación tipo tundra hasta hace unos 12 millones de años.
La Península es la parte de la Antártica que registró un mayor aumento de temperatura en las últimas décadas y su estudio es fundamental para intentar predecir cómo responderán las masas de hielo del continente al calentamiento global.
El estudio fue realizado por investigadores de la Universidad Rice, en Houston, Texas, y la Universidad Estatal de Louisiana, ambas en Estados Unidos. El documento será publicado en julio en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences.
"La mejor manera de predecir el comportamiento futuro de las capas de hielo de la Antártica es comprender su pasado", señaló John Anderson, geólogo marino de la Universidad Rice y autor principal del estudio.
Récord de polen
La investigación reconstruye el largo proceso de enfriamiento durante el cual la Península Antártica sucumbió al hielo. El continente estuvo cubierto por bosques en el pasado y se estima que las capas heladas, que hoy contienen más de dos tercios del agua dulce del planeta, comenzaron a formarse hace cerca de 38 millones de años.
Según la investigación publicada en el "Journal of Archaeological Science", las pruebas realizadas por expertos de la Universidad de Florida (UF) y del Museo de Historia Natural del Museo Smithsonian han demostrado que el fragmento de fósil y el grabado son auténticos.
La autenticidad del fósil y el grabado fue determinada tras llevar a cabo cuidadosos y numerosos exámenes, "ninguno de los cuales fue capaz de demostrar que el fósil y la talla son falsos", dijo Barbara Purdy, exprofesora de Antropología de la UF, que dirigió la investigación.
Los científicos de la UF estiman que el grabado podría remontarse a la última edad de hielo, miles de años antes de la construcción de Stonehenge, el círculo de grandes bloques de piedra del famoso Neolítico, en Inglaterra.
En concreto, los dos primeros hallazgos son un cartucho con el nombre de Keops, el segundo faraón de la IV dinastía, que reinó entre el 2609 y el 2584 a.C., y un jeroglífico sin cartucho con el nombre de su hijo Jafra, según informa Efe.
El mapa, que data de hace más de 13,600 años, está grabado en piedra y en él se plasman figuras que dan sensación de profundidad como montañas, rios o animales. Según comentan para Muy interesante los investigadores que descifran sus signos, como Pilar Utrilla, encargada de dirigir a los investigadores del Grupo Primeros Pobladores del Valle del Ebro de la Universidad de Zaragoza; los signos hallados en el mapa aún son una incógnita.
De dichos signos han podido deducir que "El autor, que estaba frente a la cueva, tal vez en un puesto de ojeo, parece tener interés por explicar un hecho, como una escena de berrea o dónde se hallan las mejores localizaciones de caza", comenta Utrilla.
Este hallazgo demuestra de nuevo que los hombres del Paleolítico tenían grandes capacidades para reproducir imágenes en movimiento, además de conceptos abstractos.
The New York Times logró acceder a un misterioso libro fotográfico, cuyo autor permanece en el anonimato. El misterioso álbum contiene varias imágenes de la Segunda Guerra Mundial que muestran tanto a Adolf Hitler como a los prisioneros de un campo de concentración en Bielorrusia.
Las fotos fueron tomadas en blanco y negro y pegadas en las páginas de un cuaderno sin referencias de fechas o lugares. Así, el periódico solicitó la asistencia de sus lectores para descifrar la identidad del fotógrafo.
El material, que estuvo escondido todo este tiempo, retrata a las víctimas del holocausto y a los mismos soldados nazis. Claramente quien tomó las instantáneas tenía acceso a los campos de concentración y se relacionaba con las tropas de Hitler.
Judith Cohen, directora de la colección de fotografía del Museo del Holocausto de Estados Unidos manifestó que: "Este álbum se diferencia de la mayoría de los demás por la calidad de sus fotografías". De esto se deduce que su autor podría haber formado parte del cuerpo promovedor de Hitler.

Este estudio es el primero en confirmar que la dieta de los neandertales no se limitaba a la carne
El equipo de investigadores encontró restos de vegetales cocidos en los dientes de estos hombres primitivos.
Este estudio es el primero en confirmar que la dieta de los neandertales no se limitaba a la carne y que era más sofisticada de lo que se pensaba.
Hasta ahora, la imagen que más se ha divulgado de los neandertales era la de grandes consumidores de carne, algo que estaba respaldado en algunas pruebas circunstanciales como el análisis químico de sus huesos que sugería que comían pocas verduras o casi ninguna.
Esta idea de la dependencia de la carne ha sido presentada por algunos como una de las razones por la que estos seres humanos se extinguieron al igual que algunos animales grandes, como los mamuts, en la Edad del Hielo.
Sin embargo, un nuevo análisis de los restos neandertales de todo el mundo contradice esos estudios químicos, ya que los investigadores encontraron granos fosilizados de materia vegetal en sus dientes y algunos de ellos estaban cocinados.