Historia Secreta
Su origen está en la India. Lo dicen científicos de Australia, Estados Unidos, Italia, España, Bulgaria y Lituania. El equipo aportó las evidencias genéticas más convincentes sobre el origen y dispersión de la etnia romaní. El equipo estudió y comparó material genético de 275 individuos de esta etnia, pero pertenecientes a 14 poblaciones sin conexión entre sí.
La pérdida de documentación, o las confusiones acerca de la existente, han propiciado a lo largo de los siglos que varios países y regiones hayan reclamado ser la cuna del navegante, muchas veces con fines nacionalistas. Sin embargo, algunas respuestas a las incógnitas se hallaban ya fijadas en un documento perteneciente a uno de los más importantes archivos asturianos, el de la familia De la Concha, que custodia en Gijón Carlos de la Concha, titulado en Genealogía, Heráldica y Derecho Nobiliario. El archivo de De la Concha alcanza los 40.000 registros y fue considerado por el Padre Patac de las Traviesas uno de los más importantes de Asturias, tras el de Revillagigedo y el de Santa Cruz de Marcenado.
El territorio costero sudoriental del Mar Negro, alberga la cadena de montañas del Cáucaso y una de los mitos heredados es esta, la historia de Zana, cuyos restos de sus descendientes habrían sido encontrados y analizados genéticamente.
Según el investigador ruso Igor Burtsev, los genetistas ya habrían descubierto, que el origen de Zana viene de una madre homo sapiens, y padre diferente, posiblemente neandertales. Aún así ya se conoce que existieron cruces entre ambos en el pasado.
El hombre de Gebelein, fue fatalmente asesinado, según un agujero encontrado bajo la escápula izquierda y descubierto por científicos y médicos especializados durante una "autopsia virtual", que ahora es expuesta hasta el 16 de diciembre en el museo.
Un reciente estudio de carbono, efectuado en una pirámide en Bosnia, prueba que ésta tiene por lo menos 25.000 años.
La mayoría de los científicos e historiadores, sin embargo, creían que la civilización humana comenzó hace unos 5.000 años con los sumerios y los babilonios. Pero luego, se hallaron artefactos mucho más antiguos. Estos descubrimientos sugieren que hubo una civilización prehistórica, alrededor del mundo, altamente avanzada.
Dos arqueólogos italianos, el Dr. Ricarrdo Brett y Niccolo Bisconti encontraron un fragmento de materia orgánica en la pirámide de Bosnia.
Ellos pudieron realizar la prueba de carbono al material dentro de la pirámide misma. Este estudio ubica a la pirámide 20.000 años antes que las civilizaciones sumerias y babilonias.
Cuando la pirámide de Bosnia fue descubierta en 2.005, los investigadores sólo pudieron calcular la edad de la tierra que cubría la pirámide, que tiene aproximadamente 12.000 años.
"La materia orgánica encontrada en la Pirámide del Sol y su análisis biológico nos dice que las pirámides tienen más de 12.500 años de edad. Las más antiguas del planeta".
La Marina Alta, junto con la Safor, concentra los principales yacimientos de la época en la Comunidad Valenciana
El importante yacimiento arqueológico hecho público por un equipo de cinco arqueólogos, que trabaja bajo el mecenazgo de la Fundación Cirne, revela un nuevo asentamiento humano en la Marina Alta de hace unos 20.000 años.
El yacimiento encontrado en la Cova del Comte, con sus grabados y pinturas de 20.000 años de antigüedad, puede ser sólo el principio, lo que se ha podido ver a primera vista, pues en realidad toda la cueva está aún por investigar. Lo que sí está ya confirmado es que los hombres del Paleolítico decidieron que la zona comprendida por las actuales comarcas de la Marina Alta y la Safor era el lugar donde querían vivir. Su edén particular en el arco mediterráneo. "Una de las zonas con más densidad de yacimientos paleolíticos en el Mediterráneo", según explica uno de los arqueólogos de este proyecto, Juan de Dios Boronat.
¡Todo está enchufado! En un periodo de tiempo relativamente corto, nuestra sociedad se ha convertido en una amplia red de portadores de información, justo como una gigantesca red neural procesando y compartiendo información dentro del vasto organismo humano. No es de sorprender que nuestro paradigma colectivo esté cambiando y tampoco es sorpresa que los más profundos patrones de nuestra composición subconsciente/arquetípica entendidos como antiguos misterios, enseñanzas y profecías, historias de poder y alegorías espirituales, aventuras épicas y leyendas añejas hayan emergido frente a nuestra consciencia, convertidos en temas irresistibles e interesantes.
Hace dos años, un estudio ya célebre demostró que los neandertales y los humanos modernos se cruzaron. El estudio del genoma de personas actuales demostraba que ambas especies tuvieron descendientes fértiles. Fruto de aquellas cópulas todos los humanos modernos llevan entre un 1% y un 4% de ADN neandertal, a excepción de los africanos subsaharianos. Los detalles de los cruces (dónde, cuándo, cuántos) quedaron en la oscuridad. Ahora, un nuevo estudio estadístico aporta más detalles sobre aquellas parejas de especies aparentemente distintas que tuvieron hijos hace miles de años.
El trabajo, publicado en PLoS ONE (en abierto), reafirma que los cruces entre sapiens y neandertales fueron muy, muy esporádicos. En total, solo unos 10.000 neandertales y sapiens llegaron a cruzarse durante un abismo de tiempo que abarcó 130.000 años de coexistencia. Así lo aseguran los cálculos de Armando Neves, de la Universidad Federal de Minas Gerais (Brasil) y Maurizio Serva, de la Universidad de Aquila (Italia), que han aplicado ecuaciones diferenciales al asunto de la hibridación humana.
Sus resultados implican un ritmo de cruce ínfimo: una pareja cada 77 generaciones, es decir, cada 1.500 años aproximadamente. Estas estimaciones estadísticas son compatibles con la escasa aportación de ADN neandertal que hay hoy en los humanos modernos (del 1% al 4%), pero están condicionadas por otras variables supuestas, como los 130.000 años de coexistencia en Oriente Medio, un dato que se basa en algunos datos arqueológicos que no son concluyentes. Las estadísticas también son compatibles con el lugar de los cruces, que habrían sucedido en Oriente Medio, según el estudio original de 2010 que destapó la hibridación.
El equipo liderado por la profesora Diana Gergova del Instituto Nacional de Arqueología y de la Academia Búlgara de Ciencias encontró los objetos mientras excavaban en la montaña Omurtag, informó la Agencia Sofía.
En el lugar se descubrieron los restos de una casa de madera con huesos carbonizados y cenizas. Junto a ellos estaban una serie de objetos de oro muy bien conservados fechados entre el siglo IV y III a.C.

Una de las tumbas, donde una caja de madera con dos fueron encontrados con sus caballos fuera. Los cadáveres fueron enterrados con sus mejores ropas y armas (puñales, hachas de bronce y arco y flechas). También pusieron láminas de oro alrededor de su cabeza y un plato de comida.
El equipo postula que una migración de los orientales que habitaban el lado este de las cumbres Altai, hacia Europa, donde habitaban los escitas europeos, hizo que estos adoptaran algunas de sus costumbres al volver.
Los investigadores descubrieron en el lado este de la cordillera, cuerpos humanos de la edad de Bronce, entre los siglos XX a VII aC y de la edad de Hierro, entre los siglos VII a II aC, y solo en estos últimos, se evidenció un cruce genético, entre asiáticos y escitas europeos.