El éxito en la vida no se mide por lo que logras sino por los obstáculos que superasLa vida es un camino. Visualizarla así es una metáfora usada desde siempre, tanto en literatura como en psicología. Y todos sabemos que no es precisamente un camino recto y fácil: hay subidas, bajadas, desvíos, y muchos obstáculos que superar. Sin embargo, tenemos que seguir caminando hacia delante.
El problema viene cuando nos apartamos de ese camino, no para dar un rodeo, sino para entrar en una calle sin salida. Sucede sin apenas darnos cuenta, pensamos que es un atajo, una forma de seguir nuestro viaje y, sin esperarlo, acabamos delante de un muro.
Y a veces nos quedamos quietos al final de esa calle, mirando fijamente ese muro, sin entender por qué no hay salida, o esperando a que mágicamente se abra una puerta para nosotros. Sufrimos porque no podemos seguir caminando, pero no volvemos atrás, sino que nos quedamos frente al muro, tristes, o golpeándolo con desesperación.
Salgamos de la metáfora y volvamos a nuestra vida cotidiana. Hay situaciones y personas que no nos llevan a ninguna parte, que nos dejan en esa calle sin salida. Relaciones de pareja o amistad que no nos hacen ningún bien ni tienen futuro, pero aún así nos aferramos a ellas desesperadamente. Proyectos o trabajos que nos angustian, que no nos aportan nada, pero a los que no logramos renunciar.
Comentario: También ayuda tomar conciencia en la desintoxicación del cuerpo por medio de una dieta saludable y ejercicios de meditación, recomendamos, para todo el mundo y muy especialmente para aquellos que atraviesan momentos de estrés emocional el programa de respiración Éirú-Eolas (se pronuncia "EIR-u O-las"), puede acceder online de forma gratuita o bien puede adquirir los DVD a través de este enlace: Éiriú-Eolas