¿El objetivo? Convertir la energía de tu mente y tu cuerpo en una especie de rayo láser capaz de trascender el espacio-tiempo.
En 1983, el teniente coronel del ejército estadounidense Wayne M. McDonnell recibió el encargo de redactar un informe para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) sobre un proyecto denominado
Proceso Gateway. Su informe, desclasificado en 2003, proporciona los puntales "científicos" -así como instrucciones y asistencia técnica- para ayudar a las personas a convertir la energía de sus mentes y cuerpos en una especie de rayo láser capaz de trascender el
espacio-tiempo.
El objetivo era "acceder al... conocimiento intuitivo que ofrece el universo", así como viajar en el tiempo y entrar en comunión con seres de otras dimensiones.
Aún más intrigante, una parte aparentemente crucial del documento, la página 25, desapareció durante 40 años.

© CIA
Para mucha gente, oír hablar de este informe fue como enterarse de que
la CIA había ensayado la clarividencia como herramienta de espionaje, o de que el Departamento de Defensa de Estados Unidos había estado
recopilando en secreto datos sobre objetos voladores no identificados, a pesar de que tachaba de locos a los observadores de ovnis. Los aficionados a la ciencia llevan mucho tiempo sintiéndose frustrados por el hecho de que los científicos se arroguen el derecho exclusivo de plantear teorías inverosímiles con impunidad. Al fin y al cabo, los científicos esperan que se les crea cuando afirman que el 95% de lo que hay en el universo es invisible, compuesto de
materia oscura y
energía oscura. Dicen que es conceptualmente posible que, como en la Interpretación de Muchos Mundos de la mecánica cuántica, creemos
nuevos universos cronológicos mediante decisiones cotidianas. Y muchos científicos laudados abrazan la teoría de cuerdas, que sugiere que nuestro universo podría ser un holograma multidimensional.
Pero cuando alguien intenta aplicar esta información para postular un significado más profundo detrás de la existencia humana, muchos físicos ponen los ojos en blanco. Una cosa es afirmar que la teoría cuántica de campos dice que el universo está formado por múltiples
campos de energía que lo conectan todo; otra es cuando alguien aplica eso a la comunión de los humanos con los árboles. Las teorías de los científicos son el resultado de ecuaciones matemáticas que pueden reproducirse, no de la experiencia humana, que puede falsificarse o imaginarse fácilmente. Para muchos físicos, la pregunta "¿Por qué estamos aquí?" tiene la misma respuesta que la pregunta "¿Por qué proceso llegamos a existir?".
Así que un proyecto como Gateway, que une la ciencia con el anhelo humano de un significado, parecía terriblemente prometedor. Pero, como finalmente resultó, el proceso
no era una pasarela entre la ciencia materialista y la
conciencia experiencial; era más bien un esfuerzo por escribir un manual técnico para lo inefable.
Comentario: Véase también: