Estados Unidos se enfrenta a la peor sequía en medio siglo, lo que presagia un alza sin precedentes en los precios de los alimentos, advierten los expertos.
© EFEVeintiséis estados norteamericanos han sido declarados zona de desastre natural, debido a la peor sequía que sufre Estados Unidos desde 1956.
Un informe del Centro Nacional de Investigación Atmosférica de Estados Unidos reveló que el país ya afrontó un desastre de esta magnitud en 1956.
Desde el punto de vista económico, el sector de la agricultura es el más afectado dado que
los campos fértiles se han convertido en desiertos sin vida. De forma exponencial el sol abrasa sin piedad a los cultivos de soja, maíz y trigo.
En los mercados del mundo impera el caos. El precio del maíz y de la soja, en comparación con el mes de junio, se han incrementado en un 30%, y el de los cultivos de aceite en un 15%.
La sequía, que golpea especialmente a todo el mediooeste, ha provocado la declaración más dramática lanzada hasta ahora por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos en su historia.
El 63% de las tierras cultivables del país sufren sequía entre moderada y extrema, según el Centro Nacional de Combate a la Sequía.