Cambios Planetarios
Un sismo de 6,3 grados en la escala de Richter se sintió este miércoles en el sur de Chile, provocando pánico en la población pero sin registrar víctimas fatales o daños en infraestructura, informó la estatal Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
El sismo se registró a las 8:57 (12H57) y el epicentro se originó a 200 km al oeste de la localidad de Lebu -unos 650 km al sur de Santiago- a una profundidad de 8,3 km, en el mismo sector afectado el 27 de febrero de 2010 por un terremoto de 8,8 grados, seguido de un maremoto que dejó más de 500 muertos.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) declaró el fin de semana 'alerta roja' departamental debido a la proliferación de siniestros en la región de Petén, norte de Guatemala.
El vocero de la Conred, David de León, dijo a periodistas que protección civil mantiene la situación de alerta departamental por los siniestros que amenazan a comunidades y a las áreas naturales protegidas.
Según las autoridades, desde que comenzó la temporada de incendios forestales 2010-2011 en noviembre pasado, se han combatido 53 eventos de magnitud en el departamento de Petén.
La situación de alerta roja se decretó por el aumento de incendios forestales en la última semana, que afectan a los municipios de Poptún, con 19 siniestros atendidos y combatidos, La Libertad (12), San Andrés (cinco) y San Benito (cinco).

Sólo queda desolación, miseria y muerte tras el paso de estos ciclones. El sufrimiento de un pueblo que recibe un azote tras otro.
Desde hace más de una semana, los refugiados en los carpas del terremoto de 2010 realizan ceremonias religiosas para que sus dioses les sean propicios durante los tiempos de tormentas.
"Aleja las lluvias fuertes y trae solo las que riegan la tierra seca", señala en creole uno de los conjuros rezados por los sacerdotes del vudú.
Entre 12 y 18 ciclones tropicales están pronosticados para la temporada que comienza mañana, ocho de ellos, se estima, podrán ser de gran intensidad.
Pero más de un año después del sismo, los escombros siguen en las calles, la basura llena las esquinas, la mayor parte de la infraestructura continúa destruida y 680 mil personas que perdieron sus casas no encuentran adónde ir. Otras 300 mil padecen cólera, más de cinco mil murieron ya por esta causa y el Ministerio de Salud considera que la cifras de enfermos aumentarán con las lluvias.
La lluvia comenzó poco después de las 13.30 horas aunque la mayor intensidad de agua y granizo se produjo sobre las 13.50 horas, según los datos facilitados por la Aemet, quien ha precisado que las tormentas se dirigen hacía el norte del país.
La tromba de agua y granizo caída ha provocado que la Policía Local se haya visto obligada a cerrar al tráfico el túnel de la Circular, que da salida hacia la N-122 en el barrio de Las Delicias, así como el túnel de Labradores, además de que ha provocado retenciones en el tráfico.
El agua acumulada ha alcanzado los diez centímetros de altura en algunas calles de ciudad, como en García Morato, donde las aceras quedaron prácticamente cubiertas e impedían el paso de los peatones, además de que en numerosos puntos de la ciudad, como en el paseo de San Vicente o en la céntrica calle Platerías los comerciantes han tenido que achicar el agua con cubos.
Según confirmó el corresponsal René Mulet Cabrera, que captó las insólitas imágenes, los granizos, algunos del tamaño de una moneda cubana de 20 centavos, cubrían decenas de metros a lo largo y ancho de esa localidad, fenómeno nunca antes observado allí ni por el más longevo de sus habitantes.
La caída de granizos estuvo acompañada de fuertes ráfagas de viento que derribaron árboles y afectaron severamente viviendas, cultivos y el ganado vacuno, en una zona totalmente agropecuaria. Esta tormenta local de grandes proporciones también afectó a otras localidades del Norte calixteño como los poblados de Cabezo, La Virginia y San Agustín de Aguarás. De inmediato, autoridades locales se personaron en estos asentamientos poblacionales y se evalúan los daños.

El epicentro estuvo a 130 kilómetros de Colchane, en territorio boliviano frente a la Primera Región
Según el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, el epicentro se ubicó 130 kilómetros al sureste de Colchane, en territorio boliviano frente a la Región de Tarapacá.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) informó que fue percibido en las regiones de Tarapacá y Arica y Parinacota.
En Iquique tuvo una intensidad de III grados Mercalli; mientras que en Cuya, Huara y Pisagua de II grados.
En el documento emitido por la Décimo Cuarta Zona Naval dicta: "se espera que el arribo de oleaje (marejada de fondo) de alta energía, combinado con mareas vivas para los días 30, 31 y 01 de junio generen olas de alturas significantes de tres a cuatro metros de altura, es decir de nueve a 13 pies de altura".
Además, la posibilidad de inundaciones en algunas áreas de la Costa, principalmente durante la marea alta (pleamar). Por lo que recomendaron a la población en general extremar precauciones, esto debido a que frente al Golfo de Tehuantepec "la interacción de un sistema ciclónico de baja presión con marejada de fondo podría aminorar a partir del día 31, el efecto de olas altas en las playas, manteniéndose aún así condiciones de alto riesgo por fuertes corrientes y olas de más de tres metros en mar abierto".
El sismo ocurrió a las 17:15 horas a una profundiad de 12 kilómetros y a 36 kilómetros al suroeste de la ciudad de Iloilo, dijo el Instituto de Vulcanología y Sismología de Filipinas, en su boletín en línea. El sismo fue de naturaleza tectónica, dijo el instituto, el cual advirtió sobre posibles réplicas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) dijo que el movimiento telúrico tuvo una mangnitud de 4,7 grados y que ocurrió a una profundidad de 52,5 kilómetros.
Filipinas está asentada en el llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, un área donde chocan las placas continentales, lo que produce sismos y actividad volcánica frecuentes
Según ha informado el 112 a Europa Press, a las 21.08 horas del domingo un particular alertó de que un rayo había afectado al contador eléctrico de una vivienda situada en el número 14 de la Rúa da Igrexa, en Torroso, en Mos.
Fueron movilizados los bomberos, que indicaron que se quemó la caja del poste y el contador de la casa debido a un relámpago que cayó en el poste de la luz.
Por su parte, a las 20.00 horas del domingo un particular avisó al 112 de que salía mucho humo del cuadro eléctrico debido a un rayo en un edificio en Arzúa, por lo que fueron movilizados los bomberos y la Guardia Civil. Los bomberos explicaron que el rayo entró por el conducto eléctrico del edificio, quemó el circuito, ardieron dos cajas de suministro y afectó a las paredes de la cuarta planta del inmueble
Según la información suministrada por el coronel Édgar Emilio Ávila, Comandante de la Octava Brigada del Ejército, los afectados con la descarga eléctrica fueron dos uniformados cuyos hechos se presentaron el domingo sobre las 3:30 de la tarde en medio de un fuerte aguacero que caía en la zona. Jairo Gañán Bueno, el otro soldado que recibió parte del rayo, sufrió algunas quemaduras y fue atendido en el hospital de Mistrató; ya está estable y nuevamente en el área de operaciones.
Jhon Cardona recibió parte del impacto a la altura de la espalda y se encuentra hospitalizado en la clínica Comfamiliar de Pereira con quemaduras de segundo y tercer grado. La evacuación de los soldados fue complicada, por el terreno en el que se presentó el hecho que está a cuatro horas del casco urbano, por lo que se debió realizar a lomo de mula. Desde el Ejército lamentaron el hecho.