Jairo Martínez se encontraba jugando béisbol en una cancha del caserío Las Lajitas, del municipio Iribarren. Una centella que cayó mientras llovía acabó con su vida.© DesconocidoEl poder letal de un rayo acabó con la vida de un pequeño de 10 años
Las fuertes lluvias acaecidas en la entidad larense han traído la desgracia a muchos hogares. Yoleida Yajure es una de estas víctimas: una centella le arrebató la vida al segundo de sus tres hijos.
Las caricias, los te quiero y los abrazos que constantemente Jairo David Martínez Yajure le daba a su madre, por cosas del destino Yoleida no los podrá sentir más. La dama con su dolor a flor de piel dijo que no entiende cómo es que la naturaleza le pudo haber arrancado a su consentido de sus brazos.
El infante de 10 años de edad tenía dos aficiones en su vida: una de ellas era salir a cazar palomitas con una fonda y la otra jugar béisbol con sus amiguitos. El niño residía con una hermanita, un hermano, su madre y padrastro en la avenida principal del caserío Las Lajitas, ubicado dentro del municipio Iribarren, en el kilómetro 15 de la carretera vieja hacía Carora.
La tarde del jueves fue a casa de su abuela en compañía de sus hermanos y como cosas de muchachos se le escapó a la anciana; para ir hasta la cancha Cerro e' Monte, conocida así por los habitantes de la zona, ubicada a cuadra y media de la casa de la abuela.
Martínez Yajure, quien tenía de posición la segunda base, estaba en plena cancha haciendo lo suyo. Un grupo grande de infantes lo acompañaba; entre risas y el juego pasaban el rato.
A las 3 de la tarde el cielo se nubló y se puso bastante negro, a la media hora comenzó a llover. Esto no fue impedimento para que los niños continuaran con su partido de béisbol.