
Centenares de ancianos y personas vulnerables fueron alojadas en refugios improvisados, en la localidad de Finale Emilia, el epicentro del temblor.
Las réplicas, cerca de cien, se sintieron sobre todo en las zonas de Mirandola, San Felicia y Finale Emilia, a 36 kilómetros al norte de Bolonia, la localidad donde se situó el epicentro del primer temblor. Una de ellas alcanzó una magnitud de 4,1 grados, eco del primer temblor de 6 grados que sacudió la región la madrugada del domingo y que dejó seis muertos en esa zona industrial y densamente poblada.
El número de desplazados aumentó de 3.000 a 5.000 y fueron instalados en varias estructuras locales, indicó el prefecto de Ferrara, Luigi Mauriello. Según los servicios de emergencia, docenas de personas también resultaron levemente heridas tras el terremoto y numerosos monumentos históricos quedaron en ruinas.