© Gerardo León (EFE)Uno de los cuerpos es retirado del pueblo.
Las copiosas lluvias que han cubierto a una tercera parte de México son la señal de que el tiempo de la cosecha del maíz, un ingrediente fundacional de la comida mexicana, se acerca. Guanajuato, un estado situado al centro de México, es uno de los más fértiles de su territorio. Ahí vivían los Ramírez, una familia de campesinos. Salieron la tarde del sábado para quitar "la mala hierba" de las milpas, para preparar la cosecha de septiembre.
Una tormenta les sorprendió en plena faena. Corrieron a resguardarse bajo un árbol y un rayo mató a siete de los nueve campesinos. Cinco mujeres y dos hombres. Tres adultos y cuatro niños. La más pequeña, de tres años. Sobrevivieron, mal heridos, una madre y su hijo.San José de Terrero, el pueblo donde vivían los campesinos,
es tan pequeño que es difícil hallar su huella en Internet, no tiene señal telefónica y mucho menos pavimentado. Los habitantes acudieron al auxilio de los campesinos y viajaron unos kilómetros para pedir ayuda. Los paramédicos llegaron poco después, pero solo para comprobar que la mayoría de la familia había fallecido.
El rayo mató en un segundo a Lina y Cristina Ramírez Calvillo, de 44 y 32 años. A Evelia, Juan, Alfredo y Guadalupe Aguilera Ramírez, de 19, 14, nueve y cinco. Y a Marlen Ramírez, de solo tres. Otra de las hermanas Ramírez Calvillo, Nieves, y su pequeño hijo, caminaban a unos metros. Esa distancia los salvó.
Comentario: Las inundaciones están arrasando el planeta este mes de julio: