
Italianos caminando por la Piazza del Popolo durante una gran nevada el 3 de enero de 2012.
Roma quedó paralizada ayer después que la ola polar de frío siberiano cubrió de un manto blanco la capital dejando a los automovilistas prisioneros y sin ayuda, pasajeros de vuelos varados y numerosas zonas sin electricidad.
El medio Rai TV informó que aeropuerto Fiumicino está operativo, pero que unos 50 vuelos fueron cancelados y esto se mantendrá en las mismas condiciones el día de hoy. Numerosas zonas se encuentran sin electricidad en el norte y centro del país por más de 24 horas. Las autoridades pidieron permanecer en sus casas, mientras las oficinas públicas, el coliseo y el foro romano están cerrados.
Los automovilistas quedaron esparcidos en las calles reclamando a los reporteros de Rai TV que no podían transitar ni volver a sus casas. Al parecer el servicio de emergencia no esparció la sal ante el anuncio de nieve y las vías estaban intransitables.