
Avión de la compañía irlandesa de bajo coste Ryanair en el aeropuerto compostelano de Lavacolla
En ese momento la tormenta que cayó sobre Compostela arreciaba y fueron varios los aviones de distintas compañías que tuvieron que sortear el temporal, aunque fue el aparato de la low cost irlandesa el que salió mal parado, justo en el momento en que iba a realizar la maniobra de aterrizaje en Lavacolla.
Aunque afortunadamente todo quedó en un susto, el aparato permanece desde ese día en el aeropuerto compostelano de Lavacolla hasta que sea reparado.
Fuentes de la compañía irlandesa indicaron que "al no tener aquí una base, los técnicos que deben reparar los daños del avión tienen que venir del Reino Unido, en concreto, de Londres".