Un paisaje lunar desde hace casi un año en lo que fue el lecho de un río y el lamento creciente de la población forman parte del nuevo capítulo de la crisis hídrica en el estado brasileño de Sao Paulo, cuyas autoridades admiten que lo peor todavía puede estar por llegar.
© EFEVista de un grafiti en la represa Jaguari, parte del sistema Cantareira, que presenta bajo nivel de agua, este 15 de enero de 2015, en la ciudad de Bragança Paulista, a 84 kilometros de Sao Paulo (Brasil).
El día después de que el gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, reconociera por primera vez que existe racionamiento en el suministro de agua en el estado más rico y poblado de Brasil, la capacidad de las presas Cantareira, que abastece a 6,5 millones de personas, continúa hoy cotizando a la baja.
Comentario: Brasil experimentó violentas tormentas y fuertes inundaciones en diciembre, sin embargo, las condiciones de sequía persisten. Para una mejor comprensión de las razones por las cuales los patrones climáticos se han convertido en extremos e impredecibles en todo el mundo, leer Cambios de la Tierra y de las conexiones humanas-Cósmica (en inglés).