Las investigaciones sugieren que la mejor esperanza está en la prevención que se basa en la alimentación y el ejercicio, específicamente reemplazar los carbohidratos con altas cantidades de grasa saludables y moderar el consumo de proteína de alta calidad. La sensibilidad al gluten parece estar involucrada en la mayoría de las enfermedades crónicas, incluyendo todas aquellas que afectan el cerebro, debido a que el gluten afecta su sistema inmunológico. La glucosa y la fructosa, (azúcares) y carbohidratos también pueden tener efectos tóxicos. Prevenir y tratar los trastornos neurológicos requiere de la restricción severa de gluten y caseína. También necesita encargarse de su flora intestinal.
La enfermedad de Alzheimer tiene proporciones epidémicas, con 5.4 millones de estadounidenses padeciéndola- incluyendo a uno de cada ocho personas de 65 años o más- viviendo con esta enfermedad.
1 En los próximos 20 años, se espera que el Alzheimer afectará a uno de cada cuatro estadounidenses, rivalizando con la prevalencia actual de obesidad y diabetes.
Aún no existe una cura aceptada para esta devastadora enfermedad y no hay tratamientos efectivos. Los medicamentos para el Alzheimer por lo general brindan muy poco o ningún beneficio en absoluto, lo que resalta la importancia de la prevención a lo largo de su vida.
Afortunadamente, la prevención del Alzheimer en realidad es más fácil de lo que podría imaginar. Existen investigaciones excepcionalmente convincentes que demuestran que su cerebro tiene una gran plasticidad, la cual se
controla por medio de la alimentación y el estilo de vida.
Aquí, el Dr. David Perlmutter- probablemente el neurólogo más reconocido en la medicina natural en los Estados Unidos, desde mi perspectiva- comparte sus puntos de vista sobre este problema generalizado. No conozco a nadie que supere su nivel de experiencia en neurología tradicional y que comparta la misma orientación filosófica que tengo.
Él tiene una clínica en Naples, Florida y ha sido muy activo en la publicación de sus resultados en revistas médicas. Al igual que yo, es miembro del
American College of Nutrition.
"Tengo una formación muy sólida en neurología tradicional," dice el Dr. Perlmutter. "Como neurólogo desde hace muchos años, me sentía más y más frustrado por nuestra falta de habilidad para tratar enfermedades. En realidad solo estábamos tratando los síntomas.
Cuando finalmente comencé a entender cuál era la causa inmediata de diversas enfermedades, me di cuenta que la neurología convencional, aunque no quiero sonar demasiado crítico, realmente no presta atención a la parte causal de la historia."
Comentario: Si bien la información proporcionada por este blog es de muy buena calidad y bastante acertada de acuerdo a nuestras propias investigaciones sobre la alimentación y el ejercicio, ya hemos resaltado que el autor recomienda seguir la dieta cetogénica solamente de vez en cuando. Según nuestra investigación, la cetosis es el estado natural del ser humano y, como tal, seguirla de manera prolongada no representa ningún problema para nuestro bienestar general, sino todo lo contrario, constituye una auténtica senda de sanación y transformación personal debido a su gran impacto positivo en nuestro cuerpo y mente.
La cetosis ha beneficiado enormemente a muchas personas con enfermedades crónicas como la epilepsia, diabetes mellitus, obesidad, enfermedades neurodegenerativas y hasta cáncer por mencionar solo unas.
Para el lector interesado, SOTT recomienda fuertemente la lectura en el foro cassiopaea.org del hilo Dieta Cetogénica: camino hacia la transformación, donde podrá conocer y aprender de la experiencia de quienes han experimentado con esta extraordinaria "forma de alimentarse".
También puede informarse más acerca de la Dieta Cetogénica leyendo estos artículos:
- La cetosis es el estado fisiológico óptimo para el ser humano
- ¡Gracias Cetosis! (Parte 1)
- ¡Gracias Cetosis! (Parte 2)
- ¡Gracias Cetosis! (Parte 3)
De manera adicional, recomendamos la lectura de nuestro Enfoque Sott sobre la dieta paleolítica:
La dieta paleolítica revisada
Y el libro La solución paleolítica de Robb Wolf