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Cientos de pequeñas y poco frecuentes mutaciones genéticas, a menudo espontáneas, juegan un papel clave en el autismo, refiere un último estudio publicado esta semana y que marca un avance en la comprensión de este complejo trastorno del desarrollo del niño. Los científicos confirmaron así la hipótesis según la cual, muchas de esas mutaciones no son hereditarias y se manifiestan solo en los individuos afectados.
EstudioLos investigadores analizaron una muestra de unas 1.000 familias de las cuales uno de los hijos padecía autismo.
Uno de los tres estudios reveló que en esos hogares el niño autista tenía cuatro veces más posibilidades que su hermano o hermana de sufrir esas mutaciones genéticas espontáneas. Todos estos trabajos, publicados recientemente en la revista
Neuron, parecen indicar que esas numerosas pequeñas variaciones genéticas afectan sobretodo a la formación de sinapsis, esenciales para que las neuronas, las células nerviosas, comuniquen entre ellas.
El doctor Michael Wigler, del Cold Spring Harbor Laboratory (Nueva York), uno de los autores principales de estos estudios, explicó que "la diversidad de las variaciones genéticas implica que un tratamiento específico a una forma de autismo puede no tener ningún efecto en la mayoría de los casos".
Comentario: Entre las posibles etiologías ambientales que podrían generar las mutaciones en el ADN se encuentran el mercurio, desequilibrio en la flora intestinal, las vacunas, la mala calidad de la dieta moderna, etc... si desea más información al respecto sugerimos hacer una búsqueda sobre todos estos temas.