Por años me ha fascinado lo que podría considerarse uno de los más grandes misterios de nuestro planeta: la desaparición de los
mamuts lanudos. Intente imaginar lo apenas imaginable: millones de mamuts gigantes congelados repentinamente de un día para otro.
Éste es un evento fascinante por muchas razones. Primero,
el congelamiento súbito es un proceso muy peculiar que realmente no ocurre en nuestro planeta. Además, dadas las circunstancias de muerte, la
magnitud y el poder involucrados para virtualmente arrasar con el género del mamut en su totalidad es verdaderamente sorprendente.
Pintura de mamut en la cueva de Rouffignac
Pero tal vez el aspecto más fascinante de este evento es que ocurrió hace apenas 13.000 años, cuando
la especie humana ya estaba ampliamente establecida sobre el planeta Tierra. Para comparar, las pinturas del
paleolítico superior encontradas en el sur de Francia (Lascaux, Chauvet, Rouffignac,...) fueron hechas entre hace 17.000 y 13.000 años.
Este evento pone en tela de juicio nuestra visión uniformista de la historia donde el progreso de la vida en nuestro planeta es un proceso lineal, que incrementa día a día, sin perturbaciones de ningún retroceso externo importante. Por tanto, tal evento arroja una luz diferente sobre
nuestra condición humana y la ilusión generalizada de que los seres humanos son una especie de criaturas todopoderosas que están por encima de las leyes naturales, incluyendo aquellas que rigen las catástrofes mayores.
Es un tema fascinante y desconcertante porque las diversas teorías que han sido propuestas en los últimos dos siglos para explicar la desaparición de los mamuts lanudos, como la de que se vieron atrapados en ríos congelados, víctimas del exceso de caza, cubiertos por tormentas de granizo, enterrados en deslizamientos de lodo, o que cayeron en grietas de hielo, o fueron atrapados por la glaciación... no son suficientes para
explicar completamente esta extinción masiva.
De modo que en este artículo intentaré proveer explicaciones acerca de cómo y por qué millones de mamuts lanudos terminaron congelados súbitamente de un día para otro.