En resumen, la historia es algo así: ¡El viejo hombre del saco, Rusia, está aquí una vez más, esta vez amenazando directamente el proceso democrático del país más democrático de todo el mundo occidental democrático! La malvada mente maestra de Putin ordenó una notoria "campaña de influencia" desatando a su ejército de trolls en internet para difundir noticias falsas en contra de la pobre Hillary. Luego le recordó a la FSB que usara un montón de referencias de osos con direcciones IP rusas y zonas horarias de Moscú mientras hackeaba los correos electrónicos del DNC. Después de eso, Putin pasó estos mensajes de correo electrónico, cuyo contenido nunca fue cubierto de forma honesta por los medios masivos, a Wikileaks, lo que por ende le permitió a Trump ganar las elecciones - ¡voilà!
Curiosamente, la prueba de esta narrativa se basó en las historias propagadas por fuentes de inteligencia anónimas desde las profundidades del mismo pantano que Trump planeaba drenar. ¿Seguro que no tendrían intereses ocultos?
Si avanzamos rápidamente nueve meses, ¿cómo se ve la historia de Rusia ahora? Pues, como los medios de comunicación principales han sido los responsables de difundir esta narrativa, debemos escuchar lo que ellos mismos tienen que decir al respecto. Hace una semana, Project Veritas comenzó a lanzar una serie de vídeos encubiertos llamados "American Pravda", donde miembros del personal de la CNN sin saberlo derraman la verdad sobre la connivencia entre Rusia y Trump para que todo el mundo vea.