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La familia de los frutos rojos, como la fresa, la frambuesa, la mora y el arándano, tienen entre sus características a un componente que activa el proceso de limpieza natural del cerebro.

Según señala un estudio presentado durante la reunión anual de la Sociedad Americana de Química, estos frutos remueven las toxinas que interfieren con las funciones cerebrales. Esto gracias a estimula a la microglías, células responsables de limpiar las proteínas tóxicas del cerebro que con el paso de los años disminuyen su actividad. O se sobreactúen y dañen las células sanas del cerebro.

Además te ayudan a contrarrestar el envejicimiento, por ser anticancerígenos y colaborará para el buen funcionamiento de tu corazón.

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