El pánico y el caos visto en los Urales rusos este invierno pasado, cuando un meteorito del tamaño de una casa explotó en el cielo, puede volver a repetirse. Los científicos dicen que la enorme roca podría no haber estado volando en solitario como se pensaba, sino más bien como parte de un grupo de asteroides que todavía representan una amenaza para la Tierra.

(En inglés)