Imagen
Aquí puedes seguir la primera y segunda parte.

Como sabéis uno de los temas clave que me gusta tratar en este blog es la importancia de regenerar el sector agrario utilizando técnicas agrícolas sostenibles, que no degraden el medio ambiente ni requieran de la utilización de sustancias químicas, a la vez que proporcionan un medio de vida digno para los agricultores. Aunque parezca extraño, existe una relación entre esta idea y la discusión de si la concentración de colesterol en sangre tiene algo que ver con las enfermedades del corazón. En la tercera parte de esta entrevista con Chris Masterjohn, Chris discute los aspectos políticos, económicos y sociales de esta problemática.


¿Es posible que las conclusiones de las instituciones públicas estén manipuladas por la industria alimentaria? ¿Cómo podemos explicar que nos animen a llevar una dieta opuesta a la que llevaban nuestros antepasados, alimentándonos principalmente con cereales procesados y aceites poliinsaturados cuya oxidación está directamente relacionada con el desarrollo de las enfermedades cardiovasculares? ¿Qué papel juega en todo esto el granjero local que produce huevos y carne mediante técnicas tradicionales? Y aún más importante, ¿qué papel jugamos todos nosotros?

Espero que esta entrevista os haya invitado a la reflexión. Sin duda para entender cómo se desarrollan las enfermedades cardiovasculares necesitaríamos mucha más información, y es posible que ni siquiera los mayores expertos del mundo en este tema tengan la respuesta. Pero creo que es importante desarrollar un escepticismo sano hacia unas recomendaciones dietéticas que cambian continuamente y que, como hemos visto, se basan en ocasiones en la tozudez de un científico o la mala praxis periodística de una revista de prestigio internacional.

Esta entrevista ha sido traducida y publicada con el permiso de Jimmy Moore, de Livin' La Vida Low Carb. Podéis encontrar la primera parte aquí y la segunda aquí.

Jimmy Moore: Chris, ¿es este un problema de relaciones públicas? ¿hace falta algún tipo de organización que comunique al consumidor lo que se está mostrando en la investigación científica? Porque suena como que en el mundo de la investigación es un hecho. La gente sencillamente lo sabe. Pero desgraciadamente no ha sido trasladado al público, así que la percepción es que si comes grasa y colesterol vas a sufrir algún daño, en lugar lo que realmente ocurre.

Chris Masterjohn: Bueno, son dos cosas distintas. Lo irónico es que sí, en el mundo de la investigación, esto es un hecho. Pero también lo es la idea de que incrementar o disminuir la concentración de colesterol en la sangre modifica tu riesgo de padecer enfermedades del corazón. Cuando te haces investigador vas a clases, lees los artículos de otra gente, lees libros. De manera que accedes a todas estas ideas que estaban ahí antes que tú, y las incorporas. Después, cuando llevas a cabo tu propia investigación, la intentas incorporar a eso que ya sabes. Muy pocos investigadores quieren mirar atrás y decir que la comunidad científica se equivocó durante veinte años, o algo parecido. Así que cuando se encuentran con esto, la mayoría de la gente dice, sabemos que el colesterol LDL provoca enfermedades del corazón. Después dicen, ¿cómo las provoca? Se oxida y después se introduce en los macrófagos y la placa se desarrolla. Es una interesante contradicción, porque nunca consideran que la última parte de esta afirmación va en contra de la primera. En otras palabras, lo que deberían estar diciendo es, si la oxidación es lo que importa, entonces deberíamos prestar más atención a lo que promueve o previene la oxidación, y no a lo que modifica la concentración. Pero lo que dicen es, ¿qué sabemos que provoca enfermedades del corazón? El colesterol LDL. Y como una pregunta separada, ¿cómo lo hace? Se oxida. ¿Y cómo se oxida? Los PUFAs de la membrana se oxidan y después estos oxidan todo lo demás.

Ahora bien, con el público general es distinto. El público tiene los medios de comunicación. Pero también tiene internet. El público también tiene bibliotecas. La clave aquí es que no podemos poner nuestra confianza en un comité gubernamental para que determine lo que dice la ciencia. La revista Time dijo, vamos a poner nuestra confianza en el NIH [N. del T. National Institutes of Health, Institutos Nacionales de la Salud], porque el NIH es parte del gobierno, y es una organización que ha sido creada para protegernos y que solo mira por nuestro interés. Pero no es una cuestión de confiar en el gobierno o no, es una cuestión de poner nuestra confianza en un único comité o una única organización, como si fuera completamente objetiva. Existe esta idea de que cuando una empresa privada realiza un estudio, no puedes fiarte de los resultados porque la empresa tiene alguna motivación económica. Pero que si el gobierno lleva el estudio a cabo, o una institución financiada con dinero público, entonces los resultados son objetivos. Pero el hecho es que todos somos subjetivos, y todos tenemos preferencias, y todo estudio científico debe ser considerado con el mismo grado de confianza y escepticismo. Por eso lo que tenemos que hacer es animar a la gente a que considere distintos puntos de vista y decida quién tiene el mejor argumento. Yo no intento convencer a nadie de que se crea lo que yo digo porque yo soy de fiar. Lo que yo quiero es que la gente escuche lo que yo digo, y después escuche lo que otras personas dicen, y decida quién tiene el mejor argumento. Quién dice las cosas con más sentido, quién es más lógico, y quién intenta incorporar todos los datos disponibles, en lugar de ignorar los datos que no le gustan y mirar solo a los datos que sí le gustan.

Jimmy Moore: Y que se fijen en si están del lado de las compañías agrícolas, farmacéuticas, y todos esos grupos que tienen un interés en que su versión se vea como la correcta.

Chris Masterjohn: Eso es cierto. Pero me gustaría desinflar un mito. Existe el mito de que para evitar su parcialidad, tenemos que confiar en el gobierno. Cuando el NIH hizo este estudio [N. del T. Chris se refiere al estudio del que habla en la segunda parte de la entrevista, en el que se estudió el efecto de un medicamento para reducir el colesterol en el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares], y a lo largo del siguiente año organizaron una conferencia que concluyó que, efectivamente, el colesterol alto en sangre era lo que causaba las enfermedades del corazón, adivina quién fue uno de los invitados. Pues bien, uno de los representantes del comité era de General Mills, y estaba ahí para representar cómo la industria alimentaria iba a utilizar esa nueva información que el estudio imparcial del gobierno había generado para modificar el suministro de alimentos de Estados Unidos, para que este suministro cumpliera con los requisitos que el estudio imparcial del gobierno había generado. Pero, espera un momento, si el estudio imparcial del gobierno hubiera dicho que los granjeros locales habían estado haciendo las cosas bien desde siempre, y que el problema era que la AHA había permitido que las compañías productoras de aceites vegetales se aprovecharan de nosotros, vendiéndonos aceite de soja, que el gobierno estaba subvencionando, entonces, ¿qué representante de las grandes corporaciones con un potencial enorme de enriquecerse hubiera sido invitado al comité? Ninguno, porque serían millones de granjeros.

Pero, en lugar de eso, y en un golpe de cósmica conveniencia, resulta que la verdad es que de hecho los granjeros locales siempre habían estado equivocados, y la experiencia dietética de miles de años era incorrecta. Y de hecho lo que necesitamos son unas modificaciones masivas en la dieta que solo pueden ser llevadas a cabo por enormes compañías privadas como General Mills. Sencillamente resulta ser así, y esta es la verdad que el estudio gubernamental imparcial ha desvelado. El representante de General Mills tuvo suerte de que esa resultó ser la verdad, así que dijo, de acuerdo, ganaré miles de millones de dólares pero, ¿sabes qué?, me preocupo tanto por la humanidad que estoy dispuesto a ganar miles de millones de dólares cambiando por completo el suministro de alimentos para poder seguir la verdad desvelada por este estudio gubernamental imparcial. Así que cogeré estas semillas de soja y estos granos de maíz que el plan imparcial de subsidios ha estado subvencionando y los compraré por debajo del precio que cuesta producirlos, y después, siguiendo la bondad de mi corazón, los convertiré en aceites vegetales que nadie en la faz de la tierra ha consumido jamás, y todo el mundo se comerá estos aceites. Desgraciadamente tengo que ganar miles de millones de dólares mientras lo hago, pero la verdad es lo que más me importa así que estoy dispuesto a ganar todo ese dinero.

Jimmy Moore: Y pondrán un logo de "saludable para el corazón" para que te sientas bien al consumirlo. [risas]

Chris Masterjohn: Si, si. Anthony Colpo tiene un libro llamado The Great Cholesterol Con [N. del T. La Gran Estafa del Colesterol] en el que utiliza un argumento muy bueno. El argumento es que la AHA tiene estatus de organización sin ánimo de lucro, pero en realidad su presidente tiene un salario comparable al del presidente de cualquier compañía multinacional, un salario desproporcionado. Y de hecho la AHA vende dos productos. Citando literalmente a un ex presidente de la AHA en un artículo del Wall Street Journal, "nosotros básicamente intentamos que los datos [N. del T. sobre la incidencia de enfermedades coronarias] tengan buena pinta para obtener más dinero del gobierno". Así que lo primero que venden es propaganda para el gobierno. Y la segunda cosa que venden es su logo de "saludable para el corazón". Tienen una lista de comida basura como los Cocoa Puffs y otros alimentos ridículos que nadie con dos dedos de frente calificaría como saludable. Las compañías que fabrican estos pseudoalimentos le compran a la AHA su logo y lo estampan en sus productos. Así que la idea de que la AHA es una organización sin ánimo de lucro es una patraña. La AHA es una organización sin ánimo de lucro en su calificación legal, pero en realidad genera una burrada de dinero. Ya sabes, el pequeño granjero que produce huevos de gallinas criadas en pastos, probablemente no tiene el dinero necesario para comprar el logo de la AHA y ponerlo en sus huevos. Por eso la AHA le da el logo a estas enormes compañías, que son las que pueden permitírselo. Por eso debemos reconocer que solo porque un estudio venga del NIH no significa que sea un estudio imparcial.

Y no solo eso, incluso si los resultados de un estudio son reales, no significa que la interpretación sea correcta. A menudo encontramos que sí, obtenemos muchos datos, pero después, cuando llega la hora de analizarlos, es el investigador el que decide cómo los interpreta y también las personas encargadas de las relaciones públicas deciden cómo presentárselo al público.

Jimmy Moore: Eso es. Se nos está acabando el tiempo, pero quería preguntarte una cosa muy importante. Porque esta es una de las cuestiones que surgen más a menudo. Sabemos que existe un problema, y que existe una facción a la que le encantaría ver que la hipótesis de la dieta y el corazón sigue aplicándose en las generaciones venideras. Pero tiene que haber un punto de inflexión. Tiene que haber algo que la gente como tú y como yo, y la gente que piensa como nosotros, y que está escuchando ahora mismo el programa, tiene que haber algo que podamos hacer para difundir este mensaje de optimismo, difundir la verdad. ¿Qué crees que podemos hacer?

Chris Masterjohn: Lo primero que todos y cada uno de nosotros debe hacer a nivel personal es equiparse con una autodefensa intelectual. Esto significa que vamos a decidir poner nuestra salud en nuestras propias manos, no en las manos de un doctor, no en la revista Times, no en las manos del gobierno. Y tú tampoco vas a poner tu salud en mis manos, ni yo la mía en las tuyas. Vamos a decidir qué argumento tiene más sentido. Vamos a escuchar los argumentos de cada lado y vamos a tomar una decisión no basándonos en quién es la persona que defiende un argumento, sino en qué es lo que tiene más sentido. Vamos a escuchar lo que dice nuestro médico, y vamos a trabajar con nuestro médico, pero también vamos a escuchar otros puntos de vista, y vamos a hacer lo que tenga más sentido para nosotros. Eso es lo que tenemos que hacer a nivel personal. Dejar de creernos las cosas solo porque tal persona lo ha dicho.

La segunda cosa que tenemos que hacer tiene más que ver con las relaciones de unos con otros, a un nivel social, político y económico. Debemos volver a comer comida de verdad otra vez. Y necesitamos empezar a crear una economía alimentaria local. Hay dos puntos de vista. El punto de vista de Monsanto, que es que Monsanto debería ser el dueño de toda la comida que todo el mundo come. Su punto de vista es, vamos a modificar genéticamente y hacer patentes y todo el mundo va a alimentarse con lo que nosotros hacemos. Y de hecho, eso es algo que ya está ocurriendo. Animo a todo el mundo a que vean la película Food Inc., si no lo han hecho ya. En esa película, como seguro que muchos de los oyentes ya saben, los granjeros que tienen cultivos que el viento a polinizado accidentalmente por una especie patentada por Monsanto, están siendo acusados de piratería. Ahora bien, una revelación crucial que se ve en esta película tiene que ver con la recolección de semillas. Aparece un hombre que se dedica a recoger semillas, tiene una máquina que recolecta semillas en los campos de las distintas granjas. Todos sus clientes granjeros están siendo perseguidos por Monsanto, sin ni siquiera llegar a los juzgados porque no tienen dinero para pagar los gastos judiciales. Lo que eso significa es que los recolectores de semillas tienen que cerrar el negocio, y por lo tanto incluso aquellos agricultores que no están comprando semilla a Monsanto ahora acabarán haciéndolo porque ya no van a ser capaces de recolectar semillas. Este es un peligro inminente, que todos vamos a tener que ceder a este imperio alimentario promovido por las grandes corporaciones y subvencionado por el gobierno.

Por eso lo que tenemos que hacer es encontrar granjeros en nuestra comunidad, y comprarles los huevos y la carne a ellos. Conoce a las personas que producen tu comida, y en la medida que sea posible, reúnete con ellas cara a cara algunas veces, para que sepas quiénes son. Tenemos que volver a comer alimentos de verdad producidos localmente. Y parte de ese proceso es entender que los huevos no son malos para la salud. Una vez que entiendes eso, y que te das cuenta de que una yema de huevo puede ser buena para ti, entonces empiezas a pensar, ¿cómo puedo conseguir las mejores yemas de huevo? Porque las yemas del Joe el granjero tienen un color naranja intenso, y las que consigo en el supermercado tienen un color amarillo pálido. Eso tiene que ver con el contenido en vitaminas. Así que voy a apoyar a Joe el granjero. Ese es el resultado de darse cuenta de que los huevos no son malos para la salud. Si me doy cuenta de que la carne no es mala para la salud, empiezo a pensar en la calidad de la carne. Y quiero carne que sea buena para mi, que no es la que tienen en el supermercado, que proviene de animales que consumen maíz y soja genéticamente modificados que producen infertilidad cuando se los dan a mamíferos en experimentos de laboratorio. Quiero la carne del granjero Joe o la granjera Jane, que están cerca de mi casa, carne de animales criados en pastos, que proviene de un óvulo y un espermatozoide. Ya ni siquiera podemos suponer que eso es así. Tienes que saber quién está produciendo tu comida, y lo que te interesan son las vacas de verdad pastando en hierba, no las vacas que comen maíz y soja genéticamente modificados subvencionados por el gobierno y producidos por Monsanto. Lo que necesitamos es apoyar a la economía local. Porque, ¿sabes qué? La economía está en un momento incierto. La economía alimentaria basada en petróleo y en técnicas agrícolas industriales tiene un futuro incierto, no se sabe lo que va a ocurrir. Por eso debemos crear conexiones en nuestras comunidades locales, y comsumir alimentos sanos y producidos de forma sostenible. Eso es lo que tenemos que hacer.

Jimmy Moore: Tienes toda la razón. Yo llevo haciendo eso varios años, Chris, y sé que tú lo haces también, comprar a granjeros locales, la carne alimentada en pastos, los huevos de gallinas en pastos, las verduras locales, realmente es una gran diferencia. Te agradecemos mucho que hayas pasado tanto tiempo hoy aquí con nosotros, en Livin' La Vida Low Carb Show. Una vez más, su nombre es Chris Masterjohn. Visita su página web en cholesterol-and-health.com, y también la web de la Fundación Weston A. Price, westonaprice.org, si quieres aprender más sobre el trabajo que Chris Masterjohn está haciendo. Muchas gracias por estar hoy aquí con nosotros.

Imagen
Chris Masterjohn: Muchas gracias Jimmy, ha sido un placer estar aquí.

Tras su espectacular pérdida de peso de más de 80 kilos en 2004 gracias a una dieta baja en carbohidratos, Jimmy Moore ha luchado en solitario por decirle al mundo lo que una dieta baja en carbohidratos puede hacer.

A través de su popular blog, Livin' La Vida Low Carb, y de su programa de radio con más de 700 episodios, ha demostrado que el estilo de vida bajo en carbohidratos está más vivo que nunca, a pesar de lo que digan los medios y alguno "expertos" de la salud.
Nota: Esta es una traducción de una entrevista entre Jimmy Moore y Chris Masterjohn que tuvo lugar el 14 de diciembre de 2009. Ni Jimmy Moore ni Chris Masterjohn tienen ninguna afiliación con Blog Disidente.

Aquí puedes seguir la primera y segunda parte.