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Las provincias canadienses de Ontario, Manitoba y Quebec tomaron esas previsiones y también preparan centros de calefacción para acoger a las personas que viven en las calles mientras persista el mal tiempo durante los próximos cuatro días.
El servicio meteorológico también pronosticó el paso de una severa tormenta invernal esta noche y mañana en los territorios de la costa atlántica.
En Estados Unidos, varias ciudades del medioeste y noreste del país como Washington DC, Nueva York y Baltimore tienen en efecto medidas similares para el resto de la semana.
Las oficinas federales ubicadas en la capital estadounidense estarán cerradas en esta jornada.
Al menos dos mil vuelos fueron cancelados en todo el país, mientras los estados de Pensilvania, Nueva Jersey, Connecticut y Virginia Occidental suspendieron la docencia.
Todas esas localidades estuvieron hace dos semanas en la ruta de otro vórtice polar con intensas ventiscas, nevadas y heladas, que obligó la cancelación de miles de vuelos e interrupciones en la transportación terrestre.
En tanto, se reportaron 21 fallecimientos por accidentes de tráfico e hipotermia en los estados de Nueva York, Indiana, Kentuchy, Nueva Jersey, Illinois y Pensilvania.
También se registraron numerosos lesionados por las mismas causas en ambos países norteamericanos, así como incendios en las estaciones de electricidad y extensos apagones que afectaron a más de medio millón de usuarios.
Aunque el nuevo frente glacial será menos intenso que el anterior, los médicos piden a la población resguardarse del temporal, evitar salir a las calles y abrigarse apropiadamente dentro y fuera de sus hogares.
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