El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó hoy que los acuerdos de Minsk no se están cumpliendo, porque las fuerzas de Kiev no desisten del uso de armas pesadas en el este del país.

ejército_ucrania
© AP/ Efrem Lukasky
"Por desgracia, las tropas de Kiev siguen usando armas pesadas, destruyendo la infraestructura económica y social del sureste (de Ucrania)", dijo Lavrov en los pasillos del Club de Discusiones Valdái en Sochi.

El canciller ruso también subrayó que "es necesario cumplir todo lo acordado en Minsk, incluido el diálogo nacional".

"Recuerdo que las autoridades ucranianas propusieron entablar dicho diálogo a comenzar el pasado 17 de abril, cuando fue aprobada en Ginebra la declaración de EEUU, Ucrania, la UE y Rusia que solicitaba el inicio de un diálogo nacional inmediato con participación de todas las regiones y las fuerzas políticas. Esta obligación todavía no se cumple", recalcó.

Asimismo, Lavrov considera que es irracional pronosticar los plazos para el fin de la crisis ucraniana y que ahora hay que concentrarse en el cumplimiento de los acuerdos de Minsk.

"Creo que esta tarea no tiene futuro (analizar cuánto tiempo durará la crisis en Ucrania), ahora hace falta concentrarse en los acuerdos de Minsk y su cumplimiento", anunció.

La crisis ucraniana, que se intensificó en abril con el inicio de la operación especial de Kiev contra las milicias independentistas en las regiones del este, derivó en un conflicto armado que hasta el 15 de octubre ha dejado ya 3.707 civiles muertos y 9.075 heridos, según el último balance de la ONU.

El 5 de septiembre, Kiev y los independentistas pactaron un alto el fuego y dos semanas más tarde, el día 19, firmaron en Minsk, en una reunión del Grupo de Contacto para Ucrania, un memorando de nueve puntos para garantizar la observancia del armisticio.

Aunque los bandos se acusan con frecuencia de violar la tregua, los observadores internacionales afirman que se respeta en general.