El Gobierno alemán califica como "muy serias" las acusaciones contenidas en el informe de Human Rights Watch sobre el uso por el Ejército ucraniano de bombas de racimo en Donetsk, dijo hoy el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert.

bombas de racimo
© RIA Novosti. Evgeny Biyatov
Human Rights Watch (HRW) publicó esta semana un informe en el que se afirma que las fuerzas gubernamentales de Ucrania arrojaron sobre Donetsk bombas de racimo a comienzos de octubre de 2014, lo que puede catalogarse como un crimen de guerra. La cancillería ucraniana declaró a su vez que no existen pruebas concretas de las conclusiones de HRW.

"Hemos tomado nota del informe de Human Rights Watch, así como de su refutación por el Gobierno de Ucrania (...). El informe no da respuesta inequívoca sobre quién usó esa arma. En todo caso, son acusaciones muy serias. El uso de bombas de racimo es inhumano", comentó el portavoz.

El informe de HRW se basa en declaraciones de testigos presenciales y grabaciones en que aparecen cartuchos de tales proyectiles y huellas de su impacto. Los defensores de los derechos humanos aducen como confirmación del uso de esas armas por el Ejército ucraniano la dirección de los proyectiles desde su lanzamiento.