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En EE.UU. se registraron casi la mitad de los ataques en 2010.
Para todos aquellos a los que la famosa película "Tiburón" de Steven Spilberg dejó marcado el miedo al gran escualo, las cifras de ataques del 2010 no les ayudarán a superar la fobia. Fue el año con más agresiones de la última década, que aumentaron un 25% respecto al año anterior.

Así se desprende del Informe Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF, por sus siglas en inglés) que cada año publica la Universidad de Florida.

Sin embargo, según los expertos, no debe sonar la alarma. El responsable de ese informe, Geroge Burgess, indicó a BBC Mundo que "han sido hechos concretos muy poco habituales como las cinco agresiones en pocos días de tres escualos en Egipto el pasado diciembre lo que ha provocado ese incremento".

Estados Unidos se colocó un año más a la cabeza de la lista de países con más ataques de tiburones en 2010, con 36 casos, cerca de la mitad del total. Le siguieron Australia (14), Sudáfrica (8), Vietnam (6) y Egipto (6). Se reportaron también casos aislados en lugares como Bahamas, Brasil o Madagascar.

Irán en aumento

Hay que remontarse al año 2000, cuando hubo 80 ataques, para superar la cifra alcanzada el año pasado. En los diez años siguientes, el número medio de incidentes fue de 63, es decir, casi un 25% menos que en 2010.

De los 79 ataques del año pasado, seis fueron mortales. Burgess explicó que esa cifra es "sólo ligeramente superior a la media de víctimas mortales de toda la década", de algo más de cuatro muertos anuales.

El experto señaló que la tasa de mortalidad por ese tipo de agresiones "se ha reducido a la mitad en los últimos 20 años". Eso se debe - dijo- a "los avances en la seguridad de las playas y los tratamientos médicos", así como a la mejora de las comunicaciones como internet, que permiten "divulgar prácticas adecuadas para evitar el peligro".

El experto reconoció que "la tendencia es a que el número de ataques aumente en la medida en que cada vez hay más personas en el planeta y los humanos pasan cada vez más tiempo en el agua".

Surfistas, la mitad de las víctimas

Sin embargo, lanzó un mensaje de tranquilidad: "las posibilidades de que uno entre en el mar y muera a consecuencia de un ataque de tiburón son ínfimas".

De todos, los surfistas son los que sufren más las embestidas de los escualos. En 2010 fueron víctimas de la mitad de los ataques, y eso, dijo Burgess es porque "los tiburones confunden sus chapoteos con los de peces en la superficie". Al igual que los de los nadadores, que representan el 37% de las víctimas.

Quienes practican submarinismo o buceo en apnea sufrieron sólo el 8% de los ataques.

Florida, capital mundial de los ataques

Un dato destacado es que pese a que el estado de Florida sigue siendo la capital de los ataques de tiburones, con cerca de dos de cada diez casos sucedidos en sus costas, esa cifra ha descendido respecto a años anteriores.

La prolongada temporada de baño que dura casi todo el año por el buen clima y los kilómetros de playas explican el elevado número de incidencias.

Sin embargo, Burgess apuntó que "en 2010, probablemente como consecuencia de la crisis económica y del vertido en el Golfo de México hubo menos turistas y eso dio lugar a menos ataques".