Miles de personas han salido a la calles en la ciudad de Katowice, Polonia, para protestar contra las políticas de acogida de refugiados y lo que ellos consideran una "inundación islámica" del país. En otros países también se prevén multitudinarias marchas contra el flujo de refugiados.


Alrededor de 30.000 personas se han congregado en Katowice, Polonia, para expresar su rechazo ante el flujo migratorio y a las políticas de acogida. Los manifestantes afirman que la mayoría de los refugiados procedentes de Oriente Medio y del Norte de África son inmigrantes económicos y condenan la decisión del gobierno polaco de aceptar 2.000 refugiados hasta 2017.

Se prevé que una marcha similar tenga lugar en Varsovia, convocada por el grupo nacionalista All-Polish Youth.



Polonia es uno de los países que se oponen más frontalmente a los intentos de la UE de obligar a sus miembros a acoger 120.000 refugiados. Aunque finalmente Polonia votó a favor de esta iniciativa, el debate que precedió a la votación puso de manifiesto que muchos polacos rechazan la iniciativa.

Este mismo sábado el grupo de extrema derecha Hogar Social Madrid planea celebrar en Madrid una marcha anti-refugiados. Además, en Reino Unido unos manifestantes de extrema derecha han salido a las calles para protestar contra el flujo de refugiados. Otra protesta similar está organizada en Rumanía, donde la gente reclama contra la islamización.

Mientras tanto, en Bruselas cerca de 15.000 personas han expresado su deseo de salir a las calles en solidaridad con los refugiados que llegan a Europa.

Peio Aierbe, miembro del comité de administración de la red euro-africana Migreurop, opina que el rechazo a los dezplazados se debe a que la gente ve en ellos una amenaza para su identidad.