El embajador ruso aquí, Vitaly Churkin, precisó en el órgano de 15 miembros que el grupo fundamentalista, que ocupa territorios en Siria, exporta con facilidad los hidrocarburos hacia el vecino país, donde es refinado por empresas.
De acuerdo con el diplomático, a partir de estructuras económicas clandestinas y la actuación de intermediarios, el importante recurso llega a Turquía, en ocasiones por sus puertos del Mediterráneo, tras el pago en efectivo a los jefes yihadistas.
Gracias a la aviación rusa, hemos logrado reducir de manera considerable el volumen de exportaciones de petróleo del EI, pero eso lo lleva a buscar otras fuentes de ingresos, alertó.
La fuerza aérea de Moscú bombardea posiciones de los islamistas en Siria, a partir de una solicitud de apoyo de Damasco.
Según Churkin, el EI potencia el contrabando de recursos naturales, bienes culturales y productos agrícolas e industriales (como cemento y fosfatos), que garantizan a su economía 700 millones de dólares anuales.
El dinero permite a los terroristas comprar armas y municiones por valor de más de 30 millones de dólares mensuales, muchas veces a partir de sociedades pantalla en Europa del Este, de donde llegan a sus manos medios de guerra fabricados con licencias rusas caducadas y bajo el argumento de armar a la oposición siria, informó.
Para el representante permanente de Moscú ante la ONU, la derrota de la economía del EI pasa por una cooperación efectiva, como la promovida en una resolución aprobada hoy en el Consejo de Seguridad, copatrocinada por Rusia, Estados Unidos y otros países.
Sin embargo, Churkin insistió en la importancia de que todas las naciones cumplan lo acordado en la iniciativa dirigida a cercar a los yihadistas en materia financiera.
"El EI es una amenaza mundial, no solo para el Medio Oriente y el norte de África, como lo demuestran sus recientes atentados, por lo que urge una lucha decisiva, que solo podemos ganar juntos", subrayó.En ese sentido, criticó que algunos estados no cumplan resoluciones previas sobre la neutralización del financiamiento a terroristas, en particular la aprobada en febrero en el propio Consejo, por iniciativa rusa.
Moscú ya había acusado a Turquía de beneficiarse del contrabando del petróleo sacado por el EI, el mes pasado, cuando un caza F-16 de Ankara derribó en territorio sirio a uno de los SU-24 rusos que participan en los bombardeos anti-terroristas en la nación levantina.
Comentario: De una forma muy sutil, pero clara, el representante ruso ha delineado la forma más efectiva de detener al Estado Islámico (algo que llevan haciendo por mucho tiempo), ahora, la participación o falta de ella, nos dejará saber (una vez más) de que lado de este conflicto se encuentran todos los poderes globales que dicen luchar contra el terrorismo, especialmente en la ultima década y media.