Tomado del libro "El Símbolo".

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España. Monserrat es un macizo montañoso de 1235 metros de altitud, diez kilómetros de largo por cinco de ancho, situado en la provincia de Barcelona a unos 35 kilómetros de la ciudad de Barcelona y perteneciente a la cordellera del prelitoral Catalán. Es un conglomerado de grandes pietra de color gris, pulidas o cantos rodados que le dan un aspecto realmente grandioso y su caracteristica y peculiar forma por la que es conocida internazionalmente, a la vez qué, desde la lejanía, le dan una inconfundible forma de Chart.

Desde hace muchos siglos se encuentra en esta mágica montaña un Monasterio Benedictino, siendo todo el conjunto muy frequentemente visitado por peregrinos y turistas de todos los lugares, ya que allí, en el monasterio y a parte de los misteriosos encanto naturales de la montaña, se encuentra la Patrona de Cataluña, la popular Moreneta, un "Virgen negra", que es costantemente visitada por gentes de diversas poblaciones, paises e incluso religiones y creencias.

En documentos del año 888 ya se mensiona la existencia de esta virgen así como la de una pequeña capilla para su custodia. En 1207 se mensionaba ya el cenobio de Sta. María, fundado por el Abad Oliva. El antipapa Luna la declaro abadía en 1409. Despues de varias vicisitudes administrativas, el monasterio cayó en poder de las tropas de Napoleón, que sin la orden expresa, quemaron la Iglesia; Iglesia de estilo románico que fue restaurada después, en 1537 pero ahora dentro del estilo Gotico.
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Lo que ocurre en Monserrat sigue siendo misterio, pues nadie sabe a ciencia cierta que es lo que realmente pasa en esta mágica montaña y en sus misteriosas entrañas, ya que los habitantes de los alrededores y de casas de las laderas, a pie de montaña mismo, ven con bastante frecuencia extrañas y deslumbrantes "luces" que evolucionan a menudo por el lugar, para luego, misteriosamente volver a desaparecer.

En la montaña se encuentra numerosas cuevas, muchas de ellas inaccesibles, en donde en unas pocas viven algunos ermitaños. Los hermanos de la Abadía no dan mucha importancia al asunto de las "luces", sólo sonríen comprensivos ante las preguntas. Lo cierto es que las "luces" se ven, incluso algunos vecinos de sus laderas se han sobresaltado en más de una ocación en la que, de madrugada, han sido despertados por una fortísima luz para seguidamente, al asomarse a su puerta o ventana, quedan estupefactos al ver en su terreno, ya no una luz, sino algo sólido, grande, muy luminoso y en forma de dos platos unidos y que al marchar, dejaba sobre el terreno rastros quemados y frofundas huellas que los asombrados vecinos descubrían a aún descubren al acercarse temerosos al día siguiente al lugar del suceso. Muchas de estas huellas han sido analizadas por especialistas, incluso por la policía, quienes llegan a la conclusión, tras los análisis pertinentes, que se necesita una presión de bastantes toneladas para dejar esas marcas tan profundas en el lugar.

Estos hechos han sido denunciados varias veces a las autoridades, pero estas se hayan impotentes para resolver el misterio. ¿Qué hay, qué se custodia o esconde en las montañas de Monserrat...? Algo similar ocurre en otros lugares, como en el Monte Shanta, en California, EE.UU., pero recordemos, que Monserrat tiene unas peculiaridades únicas y legendarias que hicieron que fuera siempre elogiada tanto por Goethe, quién decía que para él era sagrada, como por el mismisimo Richard Wagner. Iniciado que situó el argumento en su Gran Obra Parsifal en este Monte Sagrado, sin olvidar también a grandes personalidades y jerarquías eclesiásticas que han visitado con interés la Montaña: incluso el mismo Heinrich Himmler; jefe de las SS alemanas, hizo coincidir su visita a Monserrat con la misma hora en que Hitler se entrevistaba con el General Franco. La visita real de este Iniciado nazi no estaba centrada en el monasterio mismo, sino en la montaña. Leamos las palabras que el General Wolf de la SS, acompañante de Himmler, dirigió al Padre Ripoll, abad de Monserrat:
"A su excelencia no le interesa el monasterio en sí, sino que viene expresamente para recibir la naturalezza de la montaña en su relación con el misterio del Santo Grial; eso es lo más importante para él".