"No veo por qué el hombre no debe ser tan cruel como la naturaleza" - Adolf Hitler.

Volcanes, asesinatos, tsunamis, guerras, terremotos y genocidio. Son algunas de las terribles catástrofes naturales y causadas por el hombre que han flagelado a la humanidad.

Por qué hay mal, cómo se origina y cuál es la razón de su existencia, son interrogantes que siempre han atormentado al hombre. Desde tiempos prehistóricos la justificación de la maldad está relacionada con la voluntad de los dioses. Cada cultura ha asociado los cataclismos, enfermedades y el sufrimiento como castigo de las deidades. Bien sea por acción de dioses considerados buenos o por una entidades malignas cuyo objetivo es causar daño: demonios.
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DIOS: MÁS ALLÁ DEL BIEN

La filosofía intenta buscar la última instancia que origina el mal. El pensador griego Epicuro (s. III aC.) creó uno de las paradojas más controversiales de la historia y que aún genera el debate interminable entre teólogos, filósofos y ateos: comprender el mal bajo un Dios que es omnisciente, omnipotente y omnibenevolente.

"O Dios quiere quitar el mal del mundo, pero no puede (no sería omnipotente). O puede, pero no quiere (no sería omnibenevolente). O no puede ni quiere (no sería Dios); O puede y no quiere (no sería un Dios bueno). O quiere y puede", (entonces ¿por qué no lo erradica?).

Santo Tomás de Aquino, San Agustín y otros teólogos cristianos consideran que el mal es producto del alejamiento voluntario del hombre de Dios. San Agustín considera una distinción entre dos formas de maldad: el "mal moral", el que hacen los humanos, por elección propia; y el "mal natural", desastres naturales y enfermedades.

PONEROLOGÍA

Del griego poneros: mal, la Ponerología surge como una rama de la teología que estudia las razones de la maldad desde la perspectiva de la existencia de Dios.

Sin embargo, el mal afecta a toda persona con independencia de su cultura, ideología política o credo. La Ponerología por lo tanto, ha evolucionado como una ciencia con enfoque multidisciplinario que involucra la medicina, biología y la psicología para estudiar los componentes causales y procesos del génesis del mal como un fenómeno humano en sí mismo y no como algo exclusivamente religioso.

Su aproximación científica se evidencia al finalizar la Segunda Guerra Mundial. Un grupo de investigadores de Europa del Este, bajo el dominio de la Unión Soviética, estudiaron clandestinamente las razones que generaban el totalitarismo.

Los hallazgos del estudio fueron destruidos ante la persecución soviética, varios de los científicos sufrieron la tortura y la muerte. Sin embargo, el psicólogo polaco Andrzej Lobaczewski, logró memorizar parte de los resultados y conclusiones.

EL GÉNESIS DEL MAL

La Ponerología considera que la maldad es similar en naturaleza a la enfermedad. Sus raíces revelan factores patológicos, especialmente psicopatológicos.

Lobaczewski afirma que un número reducido de la población es incapaz de experimentar el rango normal de las emociones humanas, sin embargo, fingen mediante comportamientos y expresiones dichas emociones. La Psicopatía, hereditaria o adquirida y la ignorancia de su existencia, es la causa primaria de la maldad.

Los psicópatas no sólo carecen de empatía por otros, a menudo causan dolor deliberadamente. Ejercen un número de efectos sobre las personas normales: fascinación, traumas, trastornos patológico de personalidad, o emociones de venganza (un resultado de ver el mal como una simple "opción").

La causa primordial de la Ponerogénisis está en la interacción de dos factores humanos: Ignorancia de la gente normal sobre la condición mental de los psicópatas. Y la acción desapercibida de los individuos psicológicamente desviados.

Mientras más grande es la influencia del psicópata, mayor es el daño. Cualquier grupo social puede ser infectado o "ponerizado" por su influencia. La gente normal comienza a perder el pensamiento crítico y adopta la ideología fomentada por los desviados.

Comienza un proceso de enfermedad macrosocial o histeria social que infecta familias, clubes, iglesias, negocios, corporaciones y naciones enteras.

La forma más extrema del mal macrosocial es la "Patocracia" Este período de crisis está asociado con el agotamiento de los valores ideales, morales y religiosos. Un grupo reducido de psicópatas toma el control y domina al resto de los normales. Es a menudo seguida por un período de guerra, revolución, genocidio y la caída del sistema sociopolítico.

La Ponerología permite identificar esas conductas desviadas e incita el pensamiento crítico frente a la propaganda y acciones de los psicópatas. El fin último es "inmunizar" a los normales de la infección de la maldad.