Imagen
La figura de reloj de arena talla 12 americana, una forma de cuerpo en peligro de extinción.
Si te gustan las películas antiguas, habrás notado que la mujer de aquellos tiempos tendía a poseer hermosas curvas de reloj de arena, a la Marilyn Monroe. En nuestros días, tales figuras se han vuelto una rareza debido a que la mujer se ha vuelto "cuadrada" de forma. Investigaciones sugieren que en la actualidad hay cinco veces más mujeres de "forma rectangular" que aquellas con la clásica forma de reloj de Marilyn Monroe. Casi una de dos mujeres británicas caen en la categoría del rectángulo, una forma corporal masculinizada en la que existe poca diferencia entre las medidas de busto, cintura y cadera.

Según el CDC, cerca de un tercio de los adultos norteamericanos (33.8%) son obesos y aproximadamente 17% (o 12.5 millones) de niños y adolescentes de entre 2 y 19 años son obesos. En el 2010, ningún estado poseía menos del 20% de obesos. Otra estadística nos dice que más de dos tercios de los adultos en EEUU tienen sobrepeso o son obesos.

¡Dos tercios! ¡En el país donde la pirámide alimenticia de la USDA y el consumo de escasas grasas ha guiado las opciones de alimentación durante al menos dos generaciones!

A nivel mundial, con la expansión del modo de vida occidental (incluyendo la alimentación), la obesidad se ha más que duplicado desde 1980. En el 2008, 1500 millones de adultos, de 20 años y más, tenían sobrepeso y casi 43 millones de niños de menos de cinco años tenían sobrepeso en el 2010.

Según MyPyramid.gov, deberías consumir al menos 3 oz. de cereales de granos, panificados, galletas, arroz, cereal o pasta; idealmente 6 oz. Mucha de la gente que consume exactamente las cantidades recomendadas no ven una disminución de su peso en absoluto y de hecho podrían ver cómo aumenta su peso.
Imagen
Haz click sobre esta abominación para aumentarla.
¿Puede haber una relación entre este consejo alimenticio y la epidemia de obesidad? ¿Puede ser que la raíz del problema de la obesidad sean nuestros consejeros de la salud que creen que la grasa animal causa enfermedades coronarias y aumento del colesterol, y que los carbohidratos de los granos y verduras son La Solución Saludable? Basándonos en ello, resulta que una alimentación restringida en carbohidratos y rica en grasas será desalentada por parte de ellos. Se supone que debemos consumir al menos el 45% de nuestras calorías de carbohidratos cuya mayoría deberían provenir de verduras, frutas y granos. Esta filosofía de alimentación es la dominante en nuestro mundo actual a pesar de los hechos citados más arriba, a pesar de que la epidemia de obesidad ha caído sobre nosotros paso a paso con esta filosofía de alimentación.

La esencia de la vida

De todos los granos en la alimentación humana, el trigo constituye la principal fuente de la denominada nutrición humana. Es nuestra esencia de la vida. La gente consume trigo en el desayuno, almuerzo, cena y en los refrigerios. Incluso está presente en shampoo y medicamentos y en la mayoría de los alimentos procesados. Lo que mucha gente desconoce es que el trigo estimula el apetito debido el gluten del trigo es un químico similar a la morfina que produce estragos en nuestros cerebros. El trigo produce aumentos de azúcar en sangre que disparan ciclos de saciedad con aumento del apetito; promueve la glicación ("caramelización") en nuestros cuerpos que es la raíz de enfermedades y envejecimiento; activa respuestas inmunes desequilibradas, y más. El consumo de trigo está relacionado no solo con la enfermedad celíaca, sino también con desórdenes neurológicos, enfermedades coronarias, artritis, peculiares sarpullidos en la piel, esquizofrenia y muchas otras condiciones.

En Wheat Belly, el Dr. Davis describe cómo las cadenas de trigo han sido hibridizados y cruzadas para hacer que la planta del trigo resistente a condiciones ambientales, tales como sequías y patógenos, y para aumentar la producción por hectárea. La producción promedio en una granja moderna norteamericana es más de diez veces que hace solo medio siglo atrás. Esto es porque durante la última parte del siglo 20, un aumento en los métodos de hibridización transformaron al trigo en un frankesgrano cuya seguridad para la salud humana es altamente cuestionable como mínimo. Según indica el Dr. Davis, pequeños cambios en la estructura de la proteína del trigo pueden significar la diferencia entre una devastadora respuesta inmune a la proteína del trigo versus ninguna respuesta en absoluto. Señala:
Las proteínas del gluten de trigo, en particular, sufren un considerable cambio estructural con la hibridización. En un experimento de hibridización, se identificaron catorce nuevas proteínas del gluten en la descendencia que no estaban presentes en ninguna de las plantas padres. Aún más, cuando se las compara con cadenas de trigo de un siglo de antigüedad, las cadenas modernas de [trigo] expresan una mayor cantidad de genes para las proteínas de gluten que están asociadas con la enfermedad celíaca.

Multiplica estas alteraciones por los cientos de miles de hibridizaciones a las que el trigo ha sido objeto y allí tienes el potencial para dramáticos cambios en rasgos determinados genéticamente tales como la estructura del gluten.
El trigo es mayormente carbohidrato y el menor porcentaje de proteína que posee es mayormente gluten. Pero más de mil otras proteínas que no son de gluten también son parte del trigo que puede ser problemático para algunas personas. Y la mala noticia es que las proteínas similares al gluten, las proteínas que no son de gluten y los antinutrientes están presentes en TODOS los granos, Y hoy en día se cree que no tienes que ser intolerante o vulnerable a ellas para sufrir sus perjudiciales efectos:
Lectinas: su perjudicial rol en la salud intestinal, artritis reumatoidea y la pérdida de peso
Alimentación agraria y enfermedades de afluencia - ¿Causan las lectinas alimentarias evolutivas originales una resistencia a la leptina?
Lectinas alimenticias en la salud y enfermedad: una introducción
Más allá del Libre-de-Gluten: El crítico rol de las lectinas vinculantes de la quitina en la enfermedad humana
Yendo en contra de los granos hacia una mejor salud
Las plantas responden: los sorprendentes antinutrientes y toxinas naturales en los alimentos vegetales
Virus y Lectinas - los eslabones perdidos
Abriendo la Caja de Pan de Pandora: el crítico rol de la lectina del trigo en la enfermedad humana
Tomando una dosis

El gluten puede ser altamente adictivo y también puede serlo su equivalente: la caseína en productos lácteos. Ambos pueden influenciar el comportamiento y el humor. Pacientes esquizofrénicos y autistas han mejorado dramáticamente luego de eliminar el gluten y la caseína de su alimentación.

La gente que consume trigo podría experimentar efectos neurológicos similares a las drogas que pueden reversarse con medicaciones tales como naloxone y naltrexone, ¡que generalmente se utilizan para contrarrestar los efectos de las drogas narcóticas! ¿Has escuchado alguna vez de bajas dosis de naltrexone como terapia para toda clase de enfermedades autoinmunes, cáncer, enfisema pulmonar e incluso la gripe común? De hecho, una nueva droga para perder peso que contiene naltrexone podría pronto estar disponible en el mercado para disminuir la adicción a la comida. ¡Quizás todas estas personas deberían dejar de comer alimentos similares a la morfina (es decir, gluten y caseína) en lugar de tomar una droga para contrarrestar los efectos de su adicción!

A días o semanas de haber eliminado el gluten, generalmente la gente señala mejor humor, menos altibajos de humor, concentración mental y mayor sueño restaurativo. También observan una amplia variedad de mejoras en problemas de salud y un bienestar general. Pero salirse de los granos y de los lácteos realmente es como deshacerse de las drogas y muchas personas simplemente no pueden hacerlo, entonces siguen comiendo las mismas cosas que los están enfermando y engordando, mientras ingieren más y más medicación para contrarrestar los efectos del daño que sus alimentos le están haciendo a sus cuerpos.

Efecto engordante de los carbohidratos y la insulina

Imagen
© New England Journal of Medicine 2012Los efectos engordantes de la insulina en un hombre de 55 años con diabetes tipo 1 que se ha estado inyectando insulina bajo la piel de su estómago durante más de 30 años. A los pacientes se les aconseja variar el lugar de las inyecciones para no desarrollar lo que se ve arriba.
Nuestra respuesta corporal primaria a los carbohidratos es la emisión de la hormona insulina hacia el torrente sanguíneo. Todos los carbohidratos se descomponen en glucosa en los intestinos y estómago y el principal rol de la insulina es barrer la glucosa hacia las células para ser utilizada como energía. La segunda tarea de la insulina es ayudar a convertir y almacenar el azúcar como glucógeno en el hígado y músculos como grasa en células grasosas. La grasa es almacenada en forma de triglicéridos en tejidos adiposos. Si ingerimos demasiados carbohidratos, todo lo que nuestra célula no utilice como energía rápidamente termina como grasa en nuestros cuerpos gracias a la insulina. Es decir, sin el accionar de la insulina, no habría grasa en nuestros cuerpos. ¿Estás entendiendo de qué se trata?

Incluso aunque otras hormonas puedan liberar grasa de los tejidos grasos, solo pueden hacerlo cuando los niveles de insulina son bajos. Entonces, si sigues ingiriendo grandes cantidades de carbohidratos tales como granos integrales, frutas y verduras, seguirás emitiendo insulina. No te sorprendas si no observas disminución de peso alguno.

Muchas personas no piensan a los granos como azúcar, por lo tanto podría resultar sorprendente saber que el pan de trigo integral aumenta el azúcar en sangre a un nivel superior que la sacarosa. Ingerir pan de trigo integral generalmente es peor que tomarse una lata de gaseosa azucarada o comerse una barra de caramelo.

Los carbohidratos promueven obesidad de cintura. Es decir, extremos de azúcar en sangre e insulina promueven el crecimiento de grasa en vísceras. Con el tiempo, la grasa en vísceras y la grasa epiploica se acumula. La grasa visceral es inflamatoria y está relacionada con la resistencia a la insulina, diabetes, hipertensión, enfermedades coronarias, demencia, artritis reumatoidea, y cáncer de colon. De hecho, la circunferencia de cintura está demostrando ser un muy importante vaticinador de todas estas condiciones, además de pronosticador de la mortalidad.

Así que adiós a las figuras femeninas de reloj de arena y bienvenidos los pechos en hombres y grasa en abdómenes para ambos sexos.

¡Mamá, odio las verduras!

Los carbohidratos en los vegetales verdes contienen fibras indigeribles que ralentizan el proceso digestivo. Como resultado de ello, los niveles de azúcar en sangre permanecen relativamente bajos luego de ingerir verduras. Pero algunas personas se han vuelto tan sensibles a los carbohidratos que incluso las verduras verdes podrían ser un problema cuando de perder peso se trata.

Adicionalmente, hoy existen muchos estudios que indican que el exceso en la ingesta de fibras podría ser perjudicial, particularmente para la salud del intestino. El Escéptico Saludable señala que,
La mayor parte de las investigaciones que apoyan los beneficios de las fibras provienen de estudios epidemiológicos que relacionan el consumo de frutas y verduras ricas en fibras con un menor riesgo de ciertas enfermedades tales como la obesidad, enfermedades coronarias y cáncer, en particular el cáncer de colon. (1) Por el contrario, en el laboratorio, las pruebas de intervención controlada que solo suman suplementos de fibras a una alimentación de lo contrario consistente no han demostrado estos efectos protectores. (2) (3) (4) [...]

Tan y Seow-Choen, en su editorial del 2007 sobre fibras y enfermedades colorectales, denominan a la fibra insoluble como "la mayor comida chatarra", ya que "no es digerible ni absorbible y por lo tanto desprovista de nutrición". (9) El exceso de fibra insoluble puede fijarse a minerales como zinc, magnesio, calcio, y hierro, evitando la absorción de estos vitales nutrientes. (10) Grandes excesos de ciertas fibras solubles como la pectina y el guar también inhiben la actividad de la encima pancreática y la digestión de proteína en el intestino, conduciendo a un efecto anti-nutritivo. (11) La suma de fibras insolubles y solubles a los alimentos procesados podría en realidad causar que estos alimentos sean incluso menos nutritivos que si no fueran enriquecidas con fibra alguna.

Una dieta alta en fibra también ha sido descrita como estrategia preventiva para el desarrollo de diverticulosis, una enfermedad marcadamente más común en países occidentales. Sin embargo, cuando los investigadores probaron la teoría que una alimentación alta en fibra prevenía la diverticulosis, no solo descubrieron que la elevada ingesta de fibra no reducía la predominancia de diverticulosis, sino que una alimentación alta en fibra y mayor cantidad de movimientos intestinales estaban asociados independientemente con una mayor predominancia de divertículos. (12) Interesantemente, este estudio no encontró relación entre la presencia de diverticulosis y la ingesta de carne roja, grasa, o actividad física, que son otros factores comúnmente atribuidos a la diverticulosis. [...]

Esta hipótesis presenta otro aspecto al debate de la fibra: el efecto de la fibra alimenticia sobre las bacterias beneficiosas del intestino, así como también la fermentación bacteriana de fibra soluble sin digerir en ácidos grasos de cadena corta tales como el butirato.
Lo que es totalmente asombroso es que, justo después de citar los hechos mencionados arriba, ¡el "escéptico saludable" procede a recomendar vegetales al igual que hacen todos los demás! El trabajo de lavado de cerebro de la "pirámide alimenticia" de la USDA es tan omnipresente que incluso los expertos que pueden leer y comprender la investigación, no pueden salirse de la influencia de este consejo alimentario totalmente equivocado. Después de todo, ¡el gobierno nos dice que son tan nutritivos! No importa que la carne de calidad y sus grasas puedan ser mucho más nutritivas que las verduras. De hecho, el mismo butirato está presente en productos lácteos de alto contenido graso como la manteca.

De hecho, la filosofía alimenticia dominante del mundo occidental que se ha mantenido firme durante las últimas dos o tres generaciones - generaciones en las cuales la obesidad y las enfermedades han perjudicado a las poblaciones que siguen este consejo - lenta pero seguramente están siendo objeto de críticas, están siendo debatidas y cuestionadas, a medida que más y más personas reclaman su salud y sus figuras con una alimentación rica en grasas saludables y baja en carbohidratos.

Durante cientos de miles de años, nuestros ancestros practicaron la caza y el arreado, con una alimentación baja en carbohidratos. No necesariamente descartaban los carbohidratos o los consideraban poco saludables, probablemente fue más debido a que hemos pasado la mayor parte de nuestra historia evolutiva en condiciones de una era de hielo en las que los vegetales y frutas simplemente no estaban disponibles, y donde lo estaban, eran muy diferentes a las frutas y verduras disponibles hoy en día. El hecho es que nuestros cuerpos están diseñados, han evolucionado, para vivir y sobrevivir sin consumir carbohidrato alguno, mientras haya cantidades de nutritivas proteínas y grasas disponibles, y agua para beber. Estudios de excrementos humanos fosilizados de entre 300 mil a 50 mil años atrás, han revelado esencialmente una total falta de material vegetal en la alimentación de las muestras analizadas.

La grasa animal era nuestra energía principal, tal como fue - y todavía es - el más eficiente, denso y duradero combustible. Es de común acuerdo entre los expertos que nuestra extendida dependencia de la carne y grasas animales (por ejemplo, grasa de pescados) a lo largo de estas continuas épocas de congelamiento en realidad han facilitado el agrandamiento y desarrollo de nuestros cerebros para convertirnos en humanos. Nos volvimos inteligentes -Homo sapiens sapiens - gracias al consumo de grasa y carne animal. Por lo tanto, no es sorpresa notar la creciente evidencia de que los vegetarianos y miembros de sociedades agrarias posean cerebros más pequeños.

Lo que resulta tan desconcertante es que los supuestos males de las grasas animales y proteínas han sido taladradas tan fuertemente en nuestras mentes colectivas que la mayoría de la gente está muerta del miedo de comer lo que nos ha ayudado a volvernos humanos sin experimentar pensamientos intrusivos de un ataque al corazón o infarto - ¡incluso los denominados expertos en la salud que citan la evidencia según se indicó más arriba! Simplemente no pueden sacarse la idea de sus cabezas que los vegetales son necesarios "por sus vitaminas y fibras" a pesar del hecho de que han leído los estudios que muestran que todos los nutrientes que necesitas se encuentran en las proteínas y grasas animales.

En nuestro foro de discusión, personas de todo el mundo están señalando de qué manera sus necesidades de suplementos dietarios e ingesta han caído e incluso desaparecido luego de embarcarse en una alimentación baja en carbohidratos y alta en grasas.

Para sorpresa de mucha gente, ¡los problemas de toda la vida también desaparecieron luego de ajustarse a una alimentación prácticamente libre de fibra! Pequeñas cantidades de fibra provenientes de alimentos naturales y no procesados (mayormente solubles) no serán un problema para el sistema digestivo. Pero grandes cantidades de fibra como las recomendadas por las tantas autoridades de la salud pueden ser un gran problema ya que las fibras se expanden entre cuatro y cinco veces su tamaño original dentro del sistema digestivo y genera una condición de irritación intestinal constante. Las fibras expandidas tienen el potencial de crear daños a la delicada mucosa digestiva que como consecuencia se inflama. Es de esperar que numerosos individuos, entre los que me incluyo, hayan experimentado reacciones negativas extremas al realizar la altamente recomendada limpieza de colon basada en fibras. La fibra es la basura del bazar Chino.

¿Qué hay acerca de la fruta?

La fruta es en realidad incluso peor que las verduras (incluyendo jugos y jaleas de fruta). La fruta contiene un tipo de azúcar conocido como fructosa que se metaboliza casi exclusivamente en el hígado. Eso significa que aún cuando la fructosa no tiene un impacto inmediato en nuestros niveles de azúcar en sangre e insulina, en el largo plazo su metabolismo hepático puede ser la causa de muchos de sus devastadores efectos a la salud. El Dr. Mercola resume las principales diferencias entre el metabolismo de la glucosa y la fructosa, explicando porqué la fructosa es por lejos el peor tipo de azúcar existente:
-Luego de ingerir fructosa, prácticamente todo el peso metabólico recae en tu hígado. Pero con la glucosa, tu hígado solo tiene que descomponer el 20 por ciento.

-Cada célula en tu cuerpo, incluyendo tu cerebro, utiliza glucosa. Por lo tanto, gran parte de ella es "quemada" inmediatamente después de consumirla. En contraste, la fructosa es transformada en ácidos grasosos libres (FFAs), VLDL (la forma dañina del colesterol), y triglicéridos, que son almacenados como grasa.

-Los ácidos grasos generados durante el metabolismo de la fructosa se acumulan mientras la grasa gotea en tu hígado y en los tejidos musculares, causando resistencia a la insulina y la enfermedad del hígado graso no-alcohólico (NAFLD). La resistencia a la insulina progresa en un síndrome metabólico y diabetes tipo 2.

-La fructosa es el carbohidrato más lipofílico. En otras palabras, la fructosa se convierte en glicerol activado (g-3-p), que es utilizado directamente para convertir los FFAs en triglicéridos. Mientras más g-3-p tengas, más grasa almacenas. La glucosa simplemente no produce esto.

-Cuando ingieres 120 calorías de glucosa, menos de una caloría se almacena como grasa. 120 calorías de fructosa resultan en 40 calorías almacenadas como grasa. ¡Consumir fructosa es básicamente consumir grasa!

-El metabolismo de la fructosa en tu hígado crea una larga lista de desechos y toxinas, incluyendo una gran cantidad de ácido úrico, que aumenta la presión sanguínea y puede generar gota.

-La glucosa suprime la hormona grelina del apetito y causa resistencia a la leptina, la cual suprime el apetito. La fructosa no tiene efecto sobre la grelina y al interferir con la habilidad de tu cerebro para utilizar la leptina, ello resulta en una ingesta excesiva de comida.
Según MyPyramid.gov, deberíamos comer unas 2 copas de fruta por día como parte de una alimentación sana. Pero ten en mente que hemos cultivado frutas (y solo algunas frutas) solo durante unos pocos cientos de años, (principalmente árboles frutales) y las frutas que vemos hoy en día - manzanas de Fuji, peras de Bartlett, naranjas de ombligo - han sido recientemente creadas para ser mucho más dulces que las variedades salvajes y en consecuencia, son más engordantes debido a su mayor contenido de fructosa.

He encontrado mucha gente que defiende su consumo de fruta basándose en el punto de vista evolutivo de la teoría (o hipótesis debería decir) del "Fuera de África". Ellos dicen que en África había cantidades de frutas tropicales que hicieron felices a nuestros ancestros. Bueno, no vayamos tan rápido.

Posibles efectos de la proteína de la fruta en comunidades de primates en Madagascar y el neotrópico nos indica:
Los factores ecológicos que contribuyen a la evolución de las comunidades de vertebrados tropicales todavía son escasamente comprendidos. Las comunidades de primates de la América tropical poseen menos folívoros pero más frugívoros genera que las regiones tropicales del Viejo Mundo y especialmente más frugívoros genera que Madagascar. ...Las frutas neotropicales tienen mayor concentración de proteínas que las frutas de Madagascar y la mayor representación de frugívoros genera en los neotrópicos está relacionado con altas concentraciones de proteínas en frutas. Las bajas concentraciones de proteína en frutas en Madagascar restringiría la evolución de frugívoros en las comunidades de Madagascar.
Esto quiere decir que comer frutas no era la dieta principal de los primates en África y el elemento más importante que buscaban los consumidores, llevando a su desarrollo como especie, era la proteína. Es más, debería decir que las criaturas que ingieren fruta no evolucionaron en seres humanos como lo han hecho los primates expuestos a condiciones duras o inusuales. Lean La Hipótesis del Simio Acuático para obtener algunos excelentes y reveladores argumentos sobre cómo y porqué los humanos evolucionaron de la manera que lo hicieron. En resumen, si quieres involucionar en un mono, come más fruta.

En algún punto de nuestra evolución, los ácidos grasos esenciales como el DHA (ácido docosahexaenoico) - de la carne y órganos de animales de caza y otras carnes alimentadas de pasturas y alimentos marinos de agua fría - tenían un rol preponderante en nuestra alimentación al punto que se cree que solo ellas fueron responsables por el significativo aumento en el tamaño del cerebro humano. El DHA componen en mayor porcentaje de ácidos grasos en el cerebro humano, facilitando la función visual y cognitiva, formando receptores cerebrales para los neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, y sirviendo como molécula de almacenamiento que el cuerpo puede reconvertir en otro esencial ácido graso - EPA (ácido eicosapentaenoico) - de ser necesario. Entonces, como mínimo, parece que necesitamos gran cantidad de grasas animales Y aceite de pescado. Esta es nuestra herencia evolutiva como seres humanos, no como monos.

La importancia de las grasas

Nos hemos alimentado con una dieta rica en grasas saturadas y monoinsaturadas y grasas poliinsaturadas esenciales como el omega-3 a lo largo de nuestra historia sin efectos en contra de nuestra salud. Por el contrario, estas grasas fueron cruciales para nuestro desarrollo como seres humanos. Algunas de estas grasas (grasas saturadas de cadena media) incluso poseen propiedades antimicrobianas y proveen una fuente inmediata de energía. Sumado a ello, su estructura las hace menos probables de ser almacenadas como depósitos de grasa en nuestros cuerpos. Las grasas saturadas de cadena más extensa brindan combustible a los músculos, asisten en el metabolismo de las proteínas, asisten a la estructura y función cerebral, protegen nuestros pulmones de daños y protegen a los ácidos grasos poliinsaturados más vulnerables en nuestros cuerpos del daño y la rancidez.

El colesterol es esencial para nuestros cuerpos y el mito del colesterol claramente ha impulsado los números de obesidad a niveles desproporcionados. A medida que la llamada civilización occidental disemina su influencia, ahora somos menos saludables que nunca gracias al mito del colesterol:
Lo más importante que posiblemente desconozcas del colesterol
7 razones para comer más grasa saturada
El fraude del colesterol -- ¿Dónde estaban los médicos?
Los orígenes del fraude del colesterol
¿REALMENTE el colesterol alto causa enfermedades coronarias?
Porqué deberíamos comer más (y no menos) colesterol
Cómo interpretar los resultados de análisis del colesterol
Tengo colesterol alto, y no me importa
El mito del colesterol que está dañando tu salud
Un titular que nunca verás: hombre de 60 años muere de colesterol alto
El fondo de la cuestión es este: son principalmente los carbohidratos y las grasas no naturales las que te hacen obeso y poco saludable, y no las grasas naturales que en realidad nos brindan combustible y nos hacen saludables. Las grasas no naturales son aceites vegetales altamente poliinsaturados que son muy inestables y propensos a la rancidez. Las grasas malas también están presentes en granos y carnes alimentadas con maíz, alimentos de mar cultivados (si, los alimentan con maíz), aceites vegetales hidrogenados y parcialmente hidrogenados o grasas trans (margarina, manteca vegetal, aceites de soja y canola, etc.). Estas grasas no naturales contienen principalmente ácidos grasos inflamatorios omega-6. La inflamación puede ser altamente perjudicial y tóxica para nuestro cuerpo y hace prácticamente imposible la pérdida de grasa.

Si consumes estas grasas poco saludables, las grasas de tu cuerpo incluyendo las de tu cerebro y en todas las membranas celulares de tu cuerpo tendrán una huella rancia poco saludable y pro-inflamatoria. (No hay dudas que existe una correlación entre el consumo de estas grasas no saludables y el impresionante aumento de la enfermedad de Alzheimer y la temprana aparición de la demencia senil.) También es muy malo considerando que las membranas celulares poseen asombrosas habilidades y un rol crucial para nuestra salud y bienestar. Las membranas celulares no solo permiten el ingreso de nutrientes a la célula, sino que son también un aislante eléctrico que evita que la célula sea sobrepasada por cada molécula en su medioambiente. Son las estructuras de las membranas celulares las que permiten la lectura de señales medioambientales que luego conducirá a la "lectura" de genes con el objetivo que las proteínas agotadas pueden ser reemplazadas o que nuevas proteínas puedan ser leídas. Mi opinión es que un estado saludable de nuestras membranas celulares es fundamental para los tan necesarios cambios reparadores en el ADN. Pero ninguna célula puede ser saludable sin las grasas apropiadas con las que construirse. Luego de años de consumir malas grasas, aceites vegetales, y demás, las membranas celulares de la mayoría de las personas son más similares al plástico que a organismos vivientes.

Come para vivir

Si deseas perder peso sin tener hambre y por el contrario ingiriendo comida deliciosa y nutritiva, y sin realizar peligrosas y desproporcionadas cantidades de ejercicios, entonces lee nuestros testimonios y accede a los enlaces e investigación en nuestro debate de foro La vida sin pan. No solo perderás peso sin esfuerzos, sino que también recuperarás tu salud y tendrás una vida más plena.

Piénsalo, nos hemos pasado la mayor parte de la historia humana bajo una era de hielo. Nuestra fisiología, biología y genética vivió y prosperó en constante desafío y, lo que es más, probablemente deberíamos estar preparándonos para otra era de hielo en un futuro cercano. Aquellos que puedan adaptarse sobrevivirán y prosperarán.