© Sott.net¿Habrá llegado el momento de un divorcio definitivo entre EE.UU. y Europa?
Le Maire, quien asegura que junto a Alemania hacen esfuerzos para no ser víctimas de las sanciones extraterritoriales de Estados Unidos, también ha manifestado que aboga por que Europa sea un continente "soberano", no un "vasallo", y eso significa tener instrumentos de financiación totalmente independientes que hoy no existen.
En cuanto a las sanciones unilaterales de EE.UU. contra Irán, Rusia, China y Turquía, el jefe de la Diplomacia germana ha anotado que Europa ha comenzado a fortalecer su autonomía y soberanía en la política comercial, económica y financiera respecto a su viejo y tradicional aliado Estados Unidos.
"Es indispensable que fortalezcamos la autonomía europea creando canales de pago que sean independientes de los Estados Unidos, un Fondo Monetario Europeo y un sistema SWIFT (Sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales) independientes", asegura Mass.
El pasado 23 de agosto, en un artículo publicado en el diario alemán Handelsblatt firmado por Maas, este advierte que la decisión norteamericana de retirarse del acuerdo nuclear fue un error. Según Maas, resulta imperioso preservar el acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Irán y el Grupo 5+1.
"Tenemos que proteger legalmente a empresas europeas de sanciones, para lo que se requiere la cooperación entre los países europeos", expresa Maas en su artículo y para ello propone los nuevos sistemas de pago y de transmisión electrónica de datos entre las instituciones financieras independientes.
El funcionario alemán advierte también que los cambios impuestos por el mandatario estadounidense, Donald Trump, tendrán efectos a largo plazo. "Por ello, no es una opción esperar a que termine su presidencia, porque ya no podemos confiar en Washington en la misma medida que antes". Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que Estados Unidos representa una amenaza, sobre todo por su unilateralismo.
Comentario: Los líderes europeos se tomaron un largo tiempo para entender que cada uno de los pasos que dieron para secundar las demenciales acciones de EE.UU. en contra de sus propios intereses, no fueron más que una lenta y lamentable marcha hacia su ruina. Finalmente, después de haberse comportado como unos auténticos idiotas lametraseros de EE.UU. por años, un atisbo de dignidad y racionalidad parece estar floreciendo lentamente en el viejo continente. Ahora sólo resta esperar que puedan sostener en el tiempo esta sana determinación.
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