RTlun, 02 jul 2018 13:22 UTC
Un proyecto de ley facultaría al presidente de EE.UU. para despreciar dos principios fundamentales de la OMC y participar en negociaciones bilaterales con cualquier país.
© InternetVeamos cuán profundo hacen la tumba...
El Gobierno del presidente Donald Trump ha redactado un proyecto de ley que le permite a la Casa Blanca aumentar las tarifas comerciales unilateralmente sin el consentimiento del Congreso, informa el portal
Axios, que obtuvo un borrador filtrado del documento.
Si la legislación sigue adelante, ello significaría que EE.UU. abandonaría las reglas fundamentales de la Organización Mundial del Comercio (OMC). El proyecto llamado 'Ley de tarifas equitativas y recíprocas de EE.UU.' facultaría a Trump para ignorar dos principios monumentales de la OMC y participar en negociaciones bilaterales con cualquier país.
Uno de estos principios, denominado la cláusula de la nación más favorecida, prevé que los países no puedan establecer diferentes tarifas para diferentes países fuera de los acuerdos de libre comercio. El proyecto de ley también elimina los "aranceles consolidados", que son los límites arancelarios que cada país miembro de la OMC ha acordado, según subraya el medio.
Si se aprobara la legislación, "
sería el equivalente a alejarse de la OMC y nuestros compromisos allí sin que realmente notifiquemos nuestra retirada", indicó una fuente familiarizada con el asunto a Axios. Sin embargo, esa misma fuente aseguró que el Congreso "nunca" aprobaría tal medida.
La portavoz de la Casa Blanca, Lindsay Walters, explicó al portal que el proyecto de ley estaba lejos de convertirse en una realidad. "La única forma en que esto se podría convertir en noticia es si esta fuera una legislación real que la Administración estaba preparando para lanzar, pero no es así", enfatizó la vocera.
El mismo medio
informó el viernes de que Trump estaba consultando con sus asesores la posible salida de EE UU. de la OMC.
Comentario: Hasta ahora es sólo un rumor, pero considerando las últimas decisiones de Donald Trump en materia arancelaria, no sería de extrañar que entre sus opciones esté la posibilidad de salirse del organismo mundial. Si este es el caso, lo que Washington no estaría entendiendo es que esta salida no es posible de llevar a cabo sin sufrir graves consecuencias.
La OMC es una institución creada por y a medida de EE.UU.; durante décadas ha beneficiado a la economía estadounidense, una economía que se diseñó para ser netamente importadora e inmune a una balanza comercial negativa. El contexto en el cual aquello ocurrió, está desapareciendo lentamente en la actualidad, y la obsolescencia del modelo desarrollado entonces, está llevando a la desesperación al país norteamericando. La solución claramente no pasa por dar un portazo y querer destruir en 1 día lo que se construyó en décadas. EE.UU. tiene que sentarse a la mesa, negociar racionalmente, y sobre todo estar dispuesto a abandonar su posición dominante ante un mundo post-occidental que da claras muestras de reemplazar su vieja hegemonía con una dinámica multipolar y más equitativa.
Dado el historial de orgullo y prepotencia estadounidense, es poco probable que Washington de pasos en esta línea. En consecuencia lo que es esperable en el futuro es una nación cada vez más aislada y una economía sin capacidad de autosustentabilidad cada vez más en crisis.
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